Huracán empató y se salvó del descenso

Huracán empató esta noche 0-0 con Belgrano, en Parque Patricios, y logró el objetivo de mantenerse en Primera División, en la última fecha del torneo.

El "Globo" estaba fuera de la zona de descenso y necesitaba sumar un punto más para asegurar su permanencia en la máxima categoría del fútbol argentino.

A lo largo de esta temporada, ni Eduardo Domínguez, ni Ricardo Caruso Lombardi ni Juan Manuel Azconzábal pudieron sacar provecho de un plantel que daba para más y terminó muy comprometido.

Para Belgrano tampoco fue una campaña fácil, teniendo en cuenta que la empezó bajo la dirección de Esteban González y luego lo condujeron Leonardo Madelón y Sebastián Méndez para terminar en la zona baja de la tabla de posiciones con apenas 26 puntos.

Huracán venía de caer ante Lanús por 2-0 en el sur del conurbano bonaerense y Belgrano, de imponerse a Newell's Old Boys por 2-1 en Córdoba.

El anfitrión supo manejar los tiempos en su cancha y generar situaciones claras de gol, sobre todo en el primer tiempo.

A los 13 minutos de juego, Alejandro Romero Gamarra habilitó a Mariano González, quien pateó de media vuelta en el corazón del área y la pelota pasó por arriba del travesaño.

Sobre los 31, Romero Gamarra le dio la chance a Ignacio Pussetto y exigió la primera intervención importante de Lucas Acosta, quien volvió a lucirse un minuto más tarde, al desviar al córner un remate cruzado del mismo atacante, sobre el ángulo inferior derecho. Belgrano arrimó dos minutos después de la reanudación con un tiro de esquina ejecutado por Matías Suárez desde la izquierda que se fue cerrando y exigió la intervención de Marcos Díaz.

A los 4 volvió a aproximarse Huracán, con un tiro de media distancia de Romero Gamarra que pasó junto al poste derecho.

El resultado parcial del partido entre Aldosivi y Olimpo aportaba tranquilidad desde Mar del Plata, pero el complemento transcurría sin goles y los hinchas permanecían nerviosos.

Por su parte, Acosta seguía atento y a los 17 se impuso en el área otra vez para cortar un centro ambicioso de Federico Mancinelli.

Había tiempo para más y a los 40 el arquero del "Pirata" se estiró para evitar con la punta de los dedos lo que de otro modo hubiera sido gol de Norberto Briasco.

De todas maneras, la hinchada estaba disconforme y cuando el silbato de Darío Herrera sonó por última vez se manifestaron sin vueltas.

"Que se vayan todos, que no quede ni uno solo", resonó, y mientras los jugadores se despedían con los brazos en alto, un silbido multitudinario cayó sobre ellos