Y lo único que no rotó fue el
marcador: México 0-0 Jamaica

DENVER (Rafael Ramos Villagrana/Enviado) -- El peor de los peores juegos de México bajo el mando de Juan Carlos Osorio. Y el veredicto del marcador, 0-0 con Jamaica, es un leal veredicto de la miseria futbolística de la noche.

Con cuatro cambios y dos reacomódos en la cancha, que entran en el rubro de rotaciones, México se encontró con una muralla de prodigiosa voluntad y entrega con la consigna de no sufrir una derrota y mantenerse en la ruta de clasificación a los Cuartos de Final.

El juego, lejos de dramatismo, se convirtió en una comedia, por imprecisiones en los pases y hasta una deplorable incapacidad técnica para controlar el balón, especialmente en cambios de juego.

En los últimos minutos del encuentro, se escuchó con fuerza el grito de "fuera Osorio, fuera Osorio, fuera Osorio".

SUFRIENDO... EL PÚBLICO

Poco y nada. 45 minutos de un México que no sabe y no puede, y de una Jamaica que no quiere y no puede. En esa negación de esfuerzos, el saldo enturbia el partido, untándolo de monotonía y pujanza sin sentido, ante 49 mil 120 aficionados con boleto pagado, en una de las entradas más grandes para un partido de futbol en el sagrado estadio de los Broncos de Denver.

Faltas, simulaciones, caídas, con Jamaica acomodada en el fondo, con poco espacio para maniobrar de su adversario. Resistiendo, entregándole el terreno y la iniciativa, México era lento y obvio en sus intentos al frente.

Itzel Espinosa/Imago7

Jamaica intentaba a contragolpes, pero con abuso de conducción de la pelota y con temor a cambios profundos de juego, a pesar de la superioridad en velocidad, obligando a México a defenderse a veces con ocho hombres en su campo.

Los caribeños rayaron en lo estoico. Sabuesos cebados, sin menoscabo físico, se dedicaron a acosar y agobiar a cada uno de los jugadores mexicanos en una pretensión evidente de mantener intacto el marcador.

Un remate del 'Cubo' Torres, anticipando la marca, desvía con la sien el balón, pero se estampa en los tobillos del poste y regresa a control del arquero.

El resto de los 45 minutos: poco y nada. Con el 0-0 como una firma notariada e indeleble de la mediocridad somnolienta del primer tiempo. Ah, en el primer tiempo, apareció tímidamente el grito que la FIFA considera homofóbico, aunque para la sanción no importan los decibeles.

A ROTAR ROTACIONES...

Desde el palco del exilio, Juan Carlos Osorio saca a un desaparecido Rodolfo Pizarro y coloca a César Montes, con un enroque de rotaciones para desordenar aún más lo ya desordenado, y organizar a cuatro centrales, mientras el Chaka Rodríguez se quedaba en la banca.

Jamaica sigue complacido concediendo terreno y balón a México, mientras sigue paciente esperanzado en la mezcla de un latigazo de contragolpe y un descuido defensivo.

Después, Martín Barragán entró por Jesús Dueñas, pero ya el juego no modificó su cadencia somnolienta hasta desembocar en el mudo testigo del aburrido marcador con las ojeras del 0-0.

El epílogo sonoro fue en la tribuna el grito consistente de "fuera Osorio, fuera Osorio, fuera Osorio".

Ahora México viajará este viernes a San Antonio, donde el domingo cerrará la fase de grupos ante Curazao.