Santos consigue la sexta estrella a costa del Toluca

TOLUCA (Iván Cañada | ESPN) -- A la tercera la vencida. Y fue en un 20 de mayo. El día en el que Santos Laguna ha ganado la mitad de sus títulos. Los Guerreros rompieron el maleficio frente al Toluca y de premio se llevaron el campeonato del Clausura 2018.

Santos dio una lección del trabajo en equipo y del espíritu incansable para llevarse la victoria y un título que añoraron durante seis años. Los Guerreros se presentaron en un territorio prohibido en el pasado para imponer sus condiciones y mantener una ventaja que sacaron en la ida para salir con el campeonato.

La batalla no fue fácil. No lo fue desde el inicio y mucho menos al final, cuando el Toluca despertó después de tantos intentos inútiles detenidos casi siempre por un pletórico y ultra motivado Jonathan Orozco, quien sacó las manos en todo momento para defender a los suyos e impedir la caída de su marco.

Los primeros nueve minutos fueron de los escarlatas por completo. De hecho, su momento fue desde que saltaron al campo ambos equipos en un inmejorable ambiente en el Nemesio Diez, lleno desde una hora antes del comienzo de la batalla. El problema para los locales siempre fue tanto la zaga rival como las manos de Orozco.

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Al minuto 10, cuando no había manera de que Santos saliera de su campo, un contragolpe comandado por Djaniny y concretado por Julio Furch sirvió como balde de agua fría para el Toluca, que vio sus ilusiones de marcar pronto desmoronarse.

Los de Cristante se fueron abajo en el marcador y volvieron a empezar de cero, como si nada hubiera pasado. Fue un golpe anímico de apenas unos minutos para después volver a la batalla e intentar sin cesar. Rubens Sambueza, como no podía ser otro, fue quien cargó con ese peso ofensivo y lo intentó de todo: centros, balones filtrados, desbordes, disparos de larga distancia... Orozco, con el temple necesario, se estiró cuanto más pudo y lo sacó todo.

Santos jugó al contragolpe con la intención de aprovechar la larga zancada de Djaniny y su desequilibrio único. Fueron varios intentos sin concretar una más, aunque ya no era tan necesario. Menos cuando su portero salió en uno de los mejores días de su carrera para detenerlo todo.

Los Diablos, como no tenían de otra, no dejaron nada a la deriva ni bajaron los brazos. Lucharon a pesar del gigante al que enfrentaron. Cristante dio ingreso a Ángel Reyna, Gabriel Hauche y Alexis Canelo, pero ninguno pudo marcar la diferencia. La respuesta tampoco estaba en la banca.

A menos de 10 minutos del final llegó el empate por medio de Hauche y con ello una ligera esperanza, aunque no la necesaria como para resurgir por completo de las cenizas y darle la vuelta al marcador para siquiera mandar a tiempos extra.

Santos ya lo tenía en las manos y nadie se los quitó. Lo hizo por fin en Toluca, donde sus recuerdos eran amargos y tristes. La diferencia es que ahora llegaron en un 20 de mayo, fecha en la que han ganado tres de sus seis títulos de Liga.