Quien lució el brazalete de capitán durante el primer ciclo de Bianchi en el club de la Ribera aseguró que le "gustaría volver a Boca y jugar la Copa (Libertadores de América) que me perdí" cuando en 1999 emigró al Villarreal, de España.

Cagna podría ser la única, o una de las dos incorporaciones que efectuará Boca en el comienzo del año en ciernes, pues son las permitidas por el reglamento de la AFA para el próximo torneo Clausura, y habida cuenta de las recientes declaraciones de Bianchi (aclaró que "no se sumarán refuerzos para una sola competencia", al aludir a la Libertadores).

El otra vez DT boquense anticipó que aprobó las factibles gestiones para repatriar a Cagna, quien durante el último semestre militó sin sobresalir en el fútbol mexicano, luego de su paso por el Villarreal, donde no tampoco es tenido en cuenta.

"Me enteré de lo que dijo Bianchi. El es otro de los motivos por los que también volvería. Será cuestión de que los dirigentes (de Boca) me llamen para empezar a hablar" de su retorno, comentó ilusionado.

A los 32 años, el volante de ida y vuelta remarcó que su relación con la hinchada xeneize "era más o menos buena en la época de (Carlos) Bilardo, pero cuando llegó Bianchi mejoró y tuve una excelente despedida cuando partí hacia España".