Américo Gallego y Ramón Díaz, dos ex jugadores del club, son los antecesores de Pellegrini en River, cuyos dirigentes siempre prefirieron a entrenadores familiarizados con la casa y en muchos casos fracasaron cuando ficharon a técnicos que en su etapa de futbolistas no vistieron su camiseta, como César Menotti, Carlos Griguol y Carlos Babington, entre otros.

José María Aguilar, presidente desde diciembre pasado, intenta instalar nuevas costumbres en el club al entender que los entrenadores del equipo no tienen por qué ser ex jugadores riverplatenses, pese a que los más exitosos de su historia, Angel Labruna y Ramón Díaz, sí lo fueron, ya que ganaron seis y siete campeonatos, respectivamente.

El fútbol chileno y el River Plate argentino tuvieron escaso contacto hasta 1996, cuando fue fichado "El Matador" José Marcelo Salas, un goleador que en poco tiempo se ganó el cariño y la admiración de los aficionados.

Tres décadas antes jugó en el River Plate el centrocampista chileno Eladio Rojas, que trascendió en el Mundial que se jugó en 1962 en su país, y hasta hace pocas semanas formó parte de la plantilla, aunque casi sin jugar, el lateral Alejandro Escalona.

Pellegrini, campeón argentino y de la Copa Mercosur con el San Lorenzo de Almagro, es el primer entrenador chileno contratado por el River Plate en sus cien años de historia, y su desafío se multiplica porque el equipo ganó en mayo pasado el torneo Clausura, por lo cual es el campeón vigente del fútbol argentino, pese a lo cual la nueva directiva no renovó el contrato de Ramón Díaz, un técnico que por su personalidad despierta tantas pasiones a su favor como en su contra.

De ese equipo, Pellegrini no podrá contar con el delantero Ariel Ortega, traspasado al Fenerbahce turco; el centrocampista Esteban Cambiasso, recuperado por el Real Madrid, y el también medio Cristian Ledesma, que pasó al Hamburgo de Alemania, mientras que el fichaje más importante hasta ahora es el del centrocampista Luis González, procedente del Huracán.

Pellegrini se manifestó "bastante conforme" debido a que, en su opinión, "el equipo efectuó una muy buena pretemporada en todos los aspectos".

En cuanto a los cambios tácticos que se observarán en el equipo con respecto al que dirigía Ramón Díaz, el director técnico chileno dijo que "no es mucha la diferencia" y que los jugadores "en general, se adaptan rápidamente" a lo que él pretende.

"La intención mía es que River Plate esté permanentemente en ataque, en el campo contrario", indicó y añadió que jugará con tres o cuatro defensas según las circunstancias.

Acerca del posible fichaje del delantero José "Turu" Flores, del Deportivo de La Coruña español, Pellegrini dijo que "es una alternativa importante, no solamente en la parte ofensiva sino que también se puede tirar un poco atrás".

"Estamos acá estructurando un plantel, porque River tiene un equipo, sin problemas, pero no hay que olvidar que para el próximo año solamente puede haber dos cambios y tenemos Copa Libertadores y el Clausura", comentó.