No es habitual que el club que preside Florentino Pérez salga al paso para desmentir rumores sobre hipotéticas contrataciones, pero a la vista de que las informaciones aseguraban incluso la existencia de un preacuerdo, ha optado por emitir un escrito público en el que asegura que "no tiene intención alguna de negociar la contratación" de Beckham.

En el comunicado precisa que "en contra del criterio general del club" de no utilizar "cauces oficiales para desmentir rumores" quiere zanjar a través del mismo "definitivamente las crecientes especulaciones que vinculan sin fundamento alguno" a Beckham y al Real Madrid.

Por ello, en el escrito afirma que "no ha existido contacto alguno" entre el Real Madrid y el Manchester ni tampoco "directa o indirectamente" con el futbolista.

En el último mes el 'asunto Beckham' ha polarizado la atención del mercado futbolístico mundial. Ríos de tinta y horas de radio y televisión han abordado la situación.

Las portadas de periódicos de medio mundo se han visto inundadas por la posibilidad de la salida de Beckham del Manchester United y su fichaje por el Real Madrid.

CÓMO EMPEZÓ TODO
El club blanco no se había pronunciado oficialmente con la rotundidad de este martes, aunque una frase de finales de marzo, curiosamente, de Jorge Valdano, director general deportivo, fue interpretada como una declaración de intenciones.

No obstante, Valdano no tardó en matizar sus declaraciones y asegurar que la posibilidad de que el inglés jugase en el equipo blanco era "muy remota", mientras que Florentino Pérez subrayó que no era procedente un debate sobre si "Beckham interesa o no al Real Madrid porque ese rumor es una falta de respeto a un club amigo como el Manchester".

Los rumores habían recobrado más fuerza justo antes del enfrentamiento entre el United y el Real Madrid en los cuartos de final de la Champons League y hasta Luis Figo tuvo que soportar con estoicismo las versiones que indicaban que el fichaje de Beckham supondría su marcha del Real Madrid.

Valdano también se vio obligado a terciar en esta conjetura al señalar que el cuatro de abril que la posibilidad de que Figo abandonase el Real Madrid eran "nulas".

Aunque el Manchester United negó el 13 de abril de forma categórica un acuerdo para el traspaso, para calentar aún más el ambiente, Beckham pareció hasta perder la confianza de su técnico, Sir Alex Ferguson, por cuanto fue suplente en varios encuentros, incluido el de vuelta de la eliminatoria continental contra el Real Madrid.

La prensa inglesa calificó como 'castigo' de Ferguson a su futbolista la suplencia y se interpretó como un conflicto más en la, cuanto menos, complicada situación entre ambos.

Además, Beckham incluso aseguró que "nunca se puede decir nunca jamás" y se encontró otro punto a favor del traspaso en el cariñoso saludo entre Beckham y el francés Zinedine Zidane al término del encuentro de Old Trafford, que colocó al Real Madrid en las semifinales.

El internacional inglés se convertía, dentro de esta 'avalancha', en el sucesor de los Figo, Zidane y Ronaldo en la política de fichajes de relumbrón para reforzar una plantilla ya de por sí poderosa y con gran calidad.