Si se analiza la frase no hay para tanto, pero la política de fichajes del presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, implica que basta que Valdano, su "brazo derecho", mencione a una estrella para que se disparen las conjeturas.

Pérez prometió que el Real Madrid contrataría a los mejores jugadores del mundo y hasta ahora ha cumplido: el portugués Luis Figo en 2000, el francés Zinedine Zidane en 2001 y el brasileño Ronaldo en 2002.

A Valdano le preguntó el diario deportivo "As" si el "Spice Boy" (por su matrimonio con la 'Spice Girl' Victoria Adams) está en la órbita del Real Madrid. La respuesta fue: "Digamos que teniendo en cuenta los golpes que el Real Madrid ha dado en el mercado en los últimos años, David Beckham se parece a nuestro proyecto".

Nunca lo hubiera dicho. Con la política de Pérez de una estrella por año, la prensa deportiva española alimentó la idea de que el próximo objetivo del Real Madrid es la figura del Manchester United.

En la primera oportunidad que tuvo para aclarar el desaguisado, Beckham reconoció que era un honor que el Real Madrid se fijara en él, pero que su futuro "sigue en el United", donde tiene contrato hasta 2005.

Las conjeturas tenían también otra base. Las consabidas malas relaciones de Beckham con su técnico, sir Alex Ferguson, sirven de vez en cuando como argumento para hablar de una hipotética ruptura entre ambos.

Se menciona igualmente que Beckham ganaría más en el Real Madrid. En el United cobra 3,5 millones de euros brutos anuales, mientras en el equipo "merengue" Raúl, Zidane, Figo y Ronaldo están en torno a los 6 millones.

Un tercer aspecto que convencería a Beckham a marcharse a Madrid es que está harto de la morbosa atención que los diarios sensacionalistas ingleses prestan a su vida privada desde que se casó con Victoria Adams.

Sumados todos estos elementos, las versiones periodísticas dieran un paso más: el portugués Luis Figo abandonaría el Real Madrid para dejar la camiseta número "10" a Beckham.

La prensa italiana le buscó inmediatamente destino. "La Gazzetta dello Sport" coloca hoy al internacional luso en el Milan, que desde hace tiempo está buscando un jugador de las características de Figo.

"A los 30 años ha llegado el momento de elegir: ahora o nunca", dice el diario deportivo, invitando a Figo a que tome la decisión de jugar en Italia.

El impacto de las versiones comenzó a afectar a la plantilla del Real Madrid, que se jugará en abril el pase a las semifinales de la Liga de Campeones precisamente con los "Diablos rojos" del Manchester United.

El diario sensacionalista británico "The Sun" publica unas declaraciones del defensa brasileño Roberto Carlos en las que éste se deshace en elogios hacia su "amigo" Beckham y afirma que "es uno de los pocos que podría añadir fuerza a la plantilla" del Real.

Figo no tardó en salir al paso de las versiones: "me es indiferente si viene Beckham o no. No me preocupa nada. Tengo tres años más de contrato y si me quieren echar tendrán que hablar conmigo, porque yo decidiré mi futuro".

En apoyo de Figo, se manifestó José María Gutierrez "Guti" que sostuvo que las noticias sobre el supuesto interés por Beckham suponen "una falta de respeto" para el portugués, al que consideró "el mejor centrocampista por la derecha del mundo".

Ante este torrente de especulaciones, que amenazan con enturbiar las vísperas del duelo con el Manchester (el 8 de abril es la ida en el Santiago Bernabéu), Valdano ha tenido que aclarar la situación.

Si la eventualidad de que Beckham juegue algún día en el Real Madrid es "muy remota", dijo, la de que se vaya Figo no es que sea remota, "es que es imposible".