La madre del bebé le demanda el pago de seis mil dólares mensuales, que le significaría recibir 72 mil dólares al año, una cantidad que sólo percibe poco más del 15 por ciento de la población angelina.

Hernández, que pasó sin gloria por el futbol estadunidense durante dos años, no será recordado en Los Angeles por grandes actuaciones, pero quizá sí por consecuencias de su vida personal, que ahora son su dolor de cabeza.

Gleice Moreira Oliveira, una brasileña de 22 años de edad, confirmó a Notimex que el jugador del América y de la selección mexicana deberá comparecer el próximo 17 de julio ante una corte de Los Angeles, y de no hacerlo sería arrestado tan pronto ingrese a territorio estadunidense.

Entrevistada en su domicilio del oeste de Los Angeles, Gleice mostró orgullosa a su hijo, que engendró en una relación sentimental de más de un año con el jugador.

El niño, bautizado con el nombre de Luigi Hernández Oliveira, aparece cargado en brazos por el propio Luis Hernández en una fotografía colocada en la reducida sala del domicilio en un suburbio de clase media de esta ciudad.

El conflicto en la corte se inició en enero pasado, e incluso Hernández, casado con Nancy Elizabeth Rivera, con la que tiene actualmente tres hijos, solicitó el 18 de febrero al juez encargado del caso la custodia de Luigi.

Lo que era un secreto, ha salido a la luz pública al conocerse la carta enviada a la corte por Hernández, en la que argumenta que cuenta con el apoyo de su esposa, quien está enterada de que procreó un hijo fuera de su matrimonio.

"Vivo con mi esposa y mis tres hijos en Monterrey. Cuando jugaba para el Galaxy conocí a Gleice en un restaurante de Los Angeles", manifestó por escrito el "Matador".

"Ella mostró interes en mí cuando supo que era futbolista profesional. Salimos a sabiendas de que era casado y me llevó a su casa, en donde conocí a su familia", explicó al juez en la carta.

"Tuvimos relaciones y cuando me iba a México con mi equipo, se apareció para decirme que estaba embarazada y me dijo que no lo quería tener, pero tiempo después cambió de opinión y me pidió ayuda para el parto", agregó Hernandez en la carta presentada por sus abogados.

Posteriormente, añade que le envió una mensualidad de 500 dólares, "pero ahora está buscando sacar provecho y pienso que trata de hacer daño a mi familia y a mi imagen ante la sociedad mexicana y estadunidense".

"El dinero que le he mandado lo gasta en su ropa, en su carro y en boletos de avión para viajar a Brasil y me amenazó con `¨No te imaginas lo que te puedo sacar de dinero si te llevo a la corte?"", indicó el jugador, quien asegura haber a visto a Gleice consumir marihuana.

"Por eso pido la custodia de mi hijo Luigi Hernández Oliveira", remató el firmante Luis Arturo Hernández Carreón, nombre completo del afamado delantero.

Interrogada sobre lo expresado por Hernández, Gleice dijo que el estarle pidiendo al jugador que le dé seis mil dólares de pensión mensual "no es nada para quien ha ganado cientos de miles de dólares y quien engañó al juez presentando comprobantes de que gana 50 mil dólares mensuales".

"Eso es mentira, porque cuando estuvo contratado por el Galaxy se dijo que ganaría por tres temporadas tres millones y medio de dólares, por eso ya no quiso continuar con su tercer temporada en EU, porque tuvo miedo de que lo llevara a la corte y le destrozara su carrera como futbolista", señaló.

Luis Hernández dio por terminado su contrato de tres años con Los Angeles Galaxy de manera sorpresiva en su segunda campaña, en el 2001, después de una gris actuación de sólo 16 goles que decepcionó porque llegó con cartel de romperredes.

La joven de escultural figura actualmente acude al Santa Monica College, en donde continúa sus estudios universitarios. Habla español fluido gracias a que su padre, un miembro del consulado de Brasil en Los Angeles, radicó en Uruguay cuando ella tenía entre ocho y 13 años de edad.

"Luis es uno de esos machos mexicanos que no le gusta ser caballeroso. Es muy codo. Cuando se enteró que podía ser detenido por mi demanda ante la corte cuando la selección mexicana vino a jugar a San Francisco y Los Angeles me mandó un cheque de 12 mil dólares para que no lo molestara", contó.

"Pero después, mientras estuvo aquí, ni siquiera vino a visitar a su hijo, al que nunca quería ver y un día, casi forzado lo hice pasar a la casa y aproveché para tomarle la fotografía que tengo de los dos en la sala de mi casa", resaltó.

Cuando se le preguntó sobre la petición de los esposos Hernández, que solicitan al juez la custodia del bebé, Gleice soltó una carcajada y expresó: "Para nada. No le voy a entregar a mi hijo, y menos cuando nunca se ha preocupado por él, porque nunca le trajo ni siquiera un pañal".

"En principio habíamos acordado que íbamos a seguir la relación de amigos, yo no le iba a pedir que se divorciara ni que dejara a su esposa. Yo no soy de ésas. Estaba dispuesta a que viera a su hijo cuando él quisiera y que se lo llevara de vacaciones a México si así lo quisiera, pero cómo lo voy a permitir si nunca me preguntó por él", añadió

"Desde octubre del año pasado, Luis desapareció y ya no volví a saber más de él. Cuando lo busqué sólo se la pasó mintiendo y evadiendo su responsabilidad", dijo la residente en Estados Unidos desde hace dos años.

Cuando el futbolista se enteró de la demanda puesta el 8 de enero pensó que era un juego, y lo confirmó hasta que supo que iba a viajar a Estados Unidos con la selección mexicana en mayo pasado, explicó Gleice.

Aseguró que como el caso ya estaba en la corte, Hernández fue asesorado por sus abogados y tuvo miedo de que fuera detenido, "por lo que me mandó un cheque de 12 mil dólares para que no hiciera nada", aseguró la madre soltera.

Gleice dijo que el atacante mundialista deberá comparecer ante el juez el próximo 17 de Julio.

"Su situación se pone peligrosa y si no se presenta el juez me ha dicho que va a ordenar que pague una fuerte compensación desde que nació el bebé, y que cuando intente entrar a Estados Unidos será arrestado para forzarlo a comparecer", señaló.

- Pero en su justificación ante el juez él asegura que tú te aprovechaste y quisiste sacar ventaja, se le comentó.

- El dice eso sólo porque es futbolista. Dice que las muchachas se le acercan porque es famoso, pero cuando salí con él yo no sabía que era futbolista. Estaba en un bar con mi hermano, él se acerco a mí y me dijo que si quería bailar con él, y le respondi que estaba con mi hermano.

"Cuado me insistió acepte, y cuando apenas empezó a hablar me comentó: '¿Sabes que soy futbolista? Sabes que soy el número uno en México?". Yo como no sabía del futbol mexicano le dije: ¨Y a mi qué me importa? Porque yo pensaba que era mentira, ya que nunca había escuchado hablar de él", prosiguió.

"En la charla me pareció guapo y le di mi teléfono, pero la verdad no le creí que fuera futbolista y después me invitó a comer. Esa vez me llevó un diario en donde se decía que iba a ganar millones y yo me dije: este tonto me quiere impresionar", contó.

"Aquí en Los Angeles uno puede conocer a gente de mucho dinero y no te andan fanfarroneando. Pero bueno, despues nos hicimos novios y tuvimos relaciones. Mi embarazo se dio porque me hice una cirugía plástica y el medicamento que estaba tomando era tan fuerte que me estaba bloqueando el anticonceptivo", explicó.