El jugador brasileño, que fue recibido por centenares de niños deseosos de obtener un autógrafo, se mostró satisfecho por el resultado (3-1) conseguido ante el Milán en el Bernabéu, en partido de la Liga de Campeones.

El brasileño también participó en sus inicios en el Mundialito y cree que es un trampolín para los jóvenes que quieren ser futbolistas.

Este evento reúne a chavales de entre 10 y 18 años de 160 equipos de 23 países, los encuentros se disputarán en distintos puntos de la Costa Brava, en España.

Aunque se mostró en todo momento satisfecho por la victoria en el encuentro de ayer frente a los italianos, cree que podría haber jugado mejor, pero afirmó estar "contento con el trabajo del equipo".

De su compañero Raúl González comentó que "es un gran jugador y lo esta demostrando en cada partido superándose cada día" y también señaló que se entienden perfectamente.