Con goles de Antonio de Nigris (minutos 14 y 16) y de Jared Borgetti (83 y 87), la selección mexicana rompió una racha de siete partidos sin ganar y consiguió su primera victoria, a cambio de un revés, en la eliminatoria de la Confederación de Futbol hacia la justa mundialista.

El "tricolor" tiene ahora tres puntos y una diferencia de goleo de más dos, empatado con Estados Unidos (que el miércoles próximo visitará a Honduras), mientras Jamaica se estancó en igual cantidad de unidades, pero con un menos tres que lo pone en el tercer puesto.

La goleada conseguida este domingo ante un casi lleno Estadio Azteca fue de esas que poca satisfacción dejan en la afición, puesto que no fue acompañada por una buena labor de conjunto, factor que sigue sin aparecer en la era del técnico Enrique Meza.

El cuadro mexicano sigue sin desarrollar la conjunción adecuada y sin encontrar el futbol agradable que su público le exige, al carecer de un jugador de peso que orqueste la media cancha. Otra vez, lo más valioso fueron las actuaciones del portero Oswaldo Sánchez y del delantero Antonio de Nigris.

Como se esperaba, los visitantes salieron a la cancha con un esquema precavido; es decir, con la mayor parte de sus elementos en labores defensivas, lo que parecía iba a darles buenos resultados, toda vez que contuvieron exitosamente los poco claros ataques tricolores.

Sin embargo, la bien plantada defensa de los caribeños cometió el error que le costó el gol cuando mejor lucía. En tiro de esquina cobrado por Víctor Ruiz, Antonio de Nigris se adelantó a la marca y conectó con la cabeza para marcar el 1-0 al minuto 14.

El público que casi llenó el coloso de Santa Ursula aún no terminaba de festejar, cuando ya coreaba la segunda anotación de los pupilos de Enrique Meza, quienes sin mayor esfuerzo de repente ya tenían a los 16 minutos una cómoda ventaja de 2-0.

En cobro de tiro libre, el disparo de Víctor Ruiz impactó en De Nigris, quien en realidad quiso quitarse para dejar pasar el balón, pero éste le dio en el antebrazo (en acción válida, ya que estaba pegado al cuerpo) y cambió por completo su trayectoria hasta anidarse en el arco de Donovan Ricketts, quien quedó indefenso ante el desvío.

Ese era el momento esperado por los aficionados, ávidos no sólo de una goliza, sino de ver la gran actuación que tanto ansiaban por parte del "Tri", pero a cambio sólo vieron cómo México se hundió en displicencia y equivocaciones, lo que provocó que Jamaica creciera poco a poco.

Al filo de la media hora de juego, Onandi Lowe dio la primera llegada de peligro al combinado jamaicano, al sacudirse la marca de Rafael Márquez y tirar ya sin mucha fuerza, lo que ocasionó la intervención acertada de Oswaldo Sánchez.

Unos minutos después, Sánchez volvió a llevarse el aplauso del respetable, cuando recostó a lado izquierdo para detener un tiro penal mal cobrado, débil y raso, por el propio Onandi Lowe, quien instantes antes recibió falta de Márquez dentro del área.

Pese al golpe anímico, Jamaica siguió con el control del partido y generó las mejores aproximaciones, entre ellas disparos peligrosos del estelar Deon Burton, quien en un quiebre hizo ver muy mal a Duilio Davino, y de Lowe, que a estas alturas ya era la pesadilla de Rafael Márquez.

Salvo el par de tantos, ambos en jugadas a balón parado, la selección mexicana nuevamente dejó mucho que desear, sin claridad ni idea en zona de ataque, con escasa autoridad en el mediocampo y serias fallas en la zaga por falta de coordinación.

Para el segundo tiempo, Enrique Meza envió a la cancha a Daniel Osorno y Jared Borgetti en lugar de Francisco Palencia y Antonio de Nigris, pero ni así el tricolor encontró la fórmula para conseguir un mejor funcionamiento.

A los caribeños paulatinamente les afectó la altitud de la Ciudad de México, toda vez que disminuyeron su rendimiento de manera sensible y conforme avanzaba el encuentro ya nada más se limitaban a guardar sus posiciones y a rechazar de cualquier forma los embates locales.

Ya con el oponente completamente entregado, los mexicanos marcaron un par de tantos más, al menos para mejorar su diferencia de goles y dejar menos molesto al público, que ya empezaba a abucharlos y a cantar "olés" en favor de los visitantes.

Al 83, Osorno aguantó valiente una dura salida del portero Ricketts y dejó el esférico a disposición de Borgetti, quien se barrió para alcanzarlo y empujar el 3-0 de pierna derecha.

A tres minutos del final, Borgetti concretó la insípida goleada mediante un cabezazo que puso el 4-0 definitivo, tras un servicio medido de Rafael Márquez.

El arbitraje corrió a cargo del canadiense Mauricio Navarro, quien dejó correr el juego brusco y sólo amonestó a los jamaicanos Ricardo Gardner (minuto 62), Darryl Powell (65) y Tyrone Marshall (75).

En la siguiente fecha, México visitará a Trinidad y Tobago en Puerto España, mientras que Jamaica le hará los honores a Honduras a Kingston, ambos cotejos a desarrollarse el 25 de abril próximo. Por su parte, Costa Rica (un punto) recibirá a Trinidad y Tobago (sin unidades) el miércoles.

Alineaciones:
México
Oswaldo Sánchez, Pavel Pardo, Duilio Davino, Claudio Suárez, Rafael Márquez, Marco Antonio Ruiz, Germán Villa, Víctor Ruiz, Miguel Zepeda (Juan Pablo Rodríguez, 76), Francisco Palencia (Daniel Osorno, 57) y Antonio de Nigris (Jared Borgetti, 67). DT: Enrique Meza.