Todos para uno y uno para todos

En Paris-Bercy, Francia buscará ante Rusia sumar su décima Copa Davis, lo que significaría renovar el título obtenido el año pasado en Australia, logro que no se consigue desde 1932 con "los Mosqueteros"

PARIS -- Francia buscará ante Rusia sumar su décima Copa Davis, para lo cual tendrá que renovar el título logrado el año pasado en Australia, lo que colocaría a la tropa de Guy Forget en la senda de "los Mosqueteros" que dominaron la competición entre 1927 y 1932.

El espíritu de grupo que anima al actual equipo francés, hace recordar el "todos para uno y uno para todos" con el que Jean Borotra, René Lacoste, Henri Cochet y Jacques Brugnon se convirtieron en la primera nación no anglosajona en conquistar la ensaladera de plata.

Necesitó de dos finales perdidas aquel equipo para derrotar a Estados Unidos por primera vez, pero la victoria despertó un gran entusiasmo en el país, que decidió batir una pista de tenis que fue nombrada Rolnad Garros en honor de un aviador.

La renovación en cinco ocasiones de aquel título, marcó con letras doradas la leyenda de los "Mosqueteros", que individualmente también triunfaron: Borotra ganó dos Wimbledon (1924, 1926) un Abierto de Australia (1928) y un Roland Garros (1931); Cochet cuatro Roland Garros (1926, 1928, 1930, 1932), dos Wimbledon (1927, 1929) y un Abierto de Estados Unidos (1928); Lacoste tres Roland Garros (1925, 1927, 1929), dos Wimbledon (1925, 1928) y dos Abierto de Estados Unidos (1926, 1927).

Francia ha ganado posteriormente la Copa Davis en tres ocasiones más, pero nunca ha conseguido que una generación de tenistas renovara el título y marcara así una época, reto al que se enfrentan ahora los nuevos mosqueteros de Forget.

En 1991, el propio Forget formó pareja con Henri Leconte en una final que les enfrentó en Lyon a Estados Unidos, que contaba en sus filas con los jovencísimos Pete Sampras y André Agassi.

Aunque Forget perdió el primer partido contra Agassi, Leconte venció a Sampras -que el año antes había ganado el Abierto de Estados Unidos-, ambos ganaron el doble y el hoy capitán francés logró el punto definitivo contra Sampras.

Con ese triunfo, Leconte pudo desquitarse de la derrota sufrida en la final de 1982 frente a Estados Unidos, cuando formó pareja junto a Yannick Noah.

La pareja Leconte-Forget no pudo renovar su título y Francia tuvo que esperar hasta 1996 para volver a levantar una ensaladera.

Esta vez en terreno enemigo, en la pista rápida de Malmo, Forget, Cedric Pioline, Arnaud Boetsch, vencieron al conjunto sueco de Stefan Edberg, Thomas Enqvist y Nicklas Kulti. Pero tampoco lograron renovar el título, como si una maldición impidiera renovar la gesta de los "Mosqueteros".

Tras la victoria del año pasado frente Australia en Melbourne, los chicos de Forget afrontan el reto de ganar siendo campeones.

Sebastien Grosjean, Nicolas Escudé y Fabrice Santoro, que perdieron frente a los australianos la final de 1999, podrían tomar el relevo de los "Mosqueteros", para lo que tendrán el apoyo de Arnaud Clement, ausente en la final del año pasado.

Para conseguirlo, el capitán galo fomenta el espíritu de equipo en el seno de un grupo de buenos tenistas que no han logrado, de forma individual, grandes éxitos.

A diferencia de sus oponentes rusos, que se han destacado en citas del Grand Slam, los tenistas franceses les falta la punta de calidad necesaria para imponerse en estos torneos, una carencia que esperan resolver a base de esfuerzo colectivo: "todos para uno y uno para todos".

- EFE

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