Comenzando por el encuentro decisivo que por tercer año consecutivo cruzó a Indios Chapaleufú II con La Dolfina, con antecedentes como para tener en cuenta.

En 2000 y 2001, se impuso el conjunto de Cambiaso, Castagnola y los hermanos Merlos, que en esta temporada recién en Hurlingham volvieron a unirse y así, con el equipo completo, sólo cuentan con tres derrotas en su historial; nunca en este certamen donde están invictos, sino en Palermo.

Indios Chapaleufú II, por su parte fue campeón en Hurlingham pero nunca en esta etapa junto a Ignacio Heguy y Milo Fernández Araujo. Sin embargo en esta ocasión llegaron tras haber obtenido un mes antes el Abierto de Tortugas y por regularidad era el equipo más difícil a vencer.

Finalmente la bocha comenzó a rodar y antecedentes de uno y otro de por medio resultó un partidazo de principio a fin. Derrotados pero esperanzados, así volvieron a partir los hombres de Indios Chapaleufú II, que en este encuentro extenso donde se disputan ocho períodos, supieron dominar de manera impecable el primer tramo.

Cada pelota dividida fue Chapaleufú II, cada ataque terminó con un gol de un inspirado Alberto Heguy, metieron un parcial de 5 a 0 y entre el segundo y tercer tiempo La Dolfina no supo como entrarle a los Heguy.

EL GENIO CAMBIASO
Adolfo Cambiaso, por algo es distinto, especial, diferente al resto. Sin miedo a las comparaciones es como un Michael Jordan, un Tiger Woods.

La Dolfina no encontraba el camino, Cambiaso no podía con una doble marca y sin embargo fue él quien con tres toques con su sello impulsó la reacción, y ahí Sebastián Merlos, que interpretó el libreto adecuado desde el comienzo, también tuvo presencia de gol.

La historia se dio vuelta y Chapaleufú II que controlaba y miraba expectante con un colchón de dos goles, pasó a estar abajo y sin poder recuperar terreno.

Mantenían atado a Cambiaso, pero ahora el partido se jugaba al ritmo que querían los hermanos Merlos. Así llegó la campana final y el tercer festejo consecutivo de La Dolfina en Hurlingham. En el balance general el torneo fue muy positivo para la mayoría de los equipos.

Partiendo por los finalista, pasando por Indios Chapaleufú aún sin Marcos Heguy, y llegando a La Irenita y El Metejón, que serán los más chicos de Palermo, todos demostraron momentos de muy buen polo. Algo que en Tortugas había escaseado. Ellerstina merece un párrafo aparte.

Como club, donde se disputaron los cuartos de final, demostró que sus canchas tienen en la actualidad el mejor piso de la Argentina; en cuanto al equipo la vuelta de su back Miguel Novillo Astrada no alcanzó para darle el vuelo que necesita para ganar alguna pulseada entre los grandes, y eso de cara a Palermo es preocupante.

PALERMO EN EL HORIZONTE
Finalizó el Abierto de Hurlingham, y como nunca antes deberemos esperar 15 días para que arranque la NBA del polo o si se prefiere el Abierto Argentino.

Será un buen momento para que los equipos recompongan sus fuerzas, aunque para el espectador la espera será más corta. La segunda experiencia internacional del 2002 está en la cuenta regresiva con Brasil como rival y con Adolfo Cambiaso y Eduardo Heguy aguardando para saltar a la cancha el 9 de noviembre con la camiseta celeste y blanca.