"Mario Goijman, con mandato hasta el próximo 30 de abril de 2003, continua ejerciendo el cargo de presidente de la Federación Argentina de Voleibol", anunció el jueves la entidad en un comunicado distribuido a la prensa.

La FIVB suspendió recientemente al dirigente de todas sus funciones nacionales, continentales e internacionales por "no haber respetado el contrato de colaboración" para organizar el Mundial masculino 2002, y de "haber infringido el código de conducta" del máximo organismo internacional, entre otros cargos.

Como respuesta, Goijman anunció el pasado día 13 de este mes que pedirá "la expulsión" de Rubén Acosta como presidente de la FIVB por "haber falseado pruebas" en su contra.

El comunicado de la FAV indica que el Consejo Directivo de ese organismo y la totalidad de las federaciones que la integran, ratificaron el 1 de noviembre pasado "su apoyo y confianza" a Goijman "avalando plenamente las posiciones adoptadas en defensa de los intereses del deporte".

"Con relación a las manifestaciones y acciones emprendidas por la FIVB, se aclara que las medidas anunciadas no fueron adoptadas por ningún órgano estatutario de la Federación Internacional sino por el Presidente, Rubén Acosta" añade.

"La Federación Argentina considera que la citada resolución es inválida y arbitraria por estar basada en afirmaciones subjetivas del gerente general de la FIVB y por haber violado el derecho de defensa previa atribuible a toda persona", indica la nota.

Según la FAV, "el voleibol argentino se siente indignado y profundamente dolido porque la vertiginosa evolución y desarrollo del deporte -a lo largo de estos seis años- coronado por un exitoso Campeonato Mundial de Voleibol -unánimemente reconocido y por mérito de la FAV, Mario Goijman y todo un equipo de dirigentes y profesionales- pretende ser empañado por el doctor Acosta".

El comunicado afirma que Acosta utiliza "mecanismos de presión a través de la falta de pago a la FAV de las sumas que expresamente ha reconocido adeudar".

La FIVB culpa a Goijman de "haber firmado contratos de patrocinio que no eran de sus competencia y sin autorización, por un importe de 158.888 dólares".