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La NBA protege los juegos principales con descansos en calendario

¿Recuerdas cuando LeBron James bebió un café en la banca durante su noche de descanso en televisión nacional ante los LA Clippers? ¿O cuando Steve Kerr les dio un descanso de salud a Stephen Curry, Klay Thompson, Draymond Green y Andre Iguodala en ABC ante los San Antonio Spurs en marzo pasado?

La Liga lo recuerda.

En abril pasado, el comisionado de la NBA, Adam Silver, declaró que “no hay ningún problema más importante en la liga” que los descansos de salud durante los juegos principales. Como se dio a conocer en el calendario que fue lanzado el lunes, la liga ha puesto en la prensa la duela completa para poner fin al problema para siempre.

En respuesta a un número récord de partidos perdidos debido al descanso la temporada pasada -en más de 200 casos según la cuenta de lesiones de InStreetClothes.com del rastreador Jeff Stotts- la NBA decidió reducir la pretemporada e iniciar la temporada regular una semana antes, y comenzar el 17 de octubre en contraposición a la temporada regular pasada que arrancó el 25 de octubre.

¿El resultado? El número de juegos seguidos ha sido cortado de 16.3 por equipo la campaña anterior a 14.4, y marca un récord bajo para la NBA por tercera temporada seguida. Los equipos también pueden descansar sabiendo que los temidos cuatro juegos en cinco días -un elemento básico en los programas de la NBA durante décadas- son historia.

Hay 70 casos tales como en la temporada 2014-2015, pero el último calendario ampliado tiene cero. Para los equipos que buscan sobrevivir a la temporada regular con sus estrellas sanas y frescas en la postemporada, es una enorme victoria.

No se equivoque: la mayor diferencia esta temporada es la salvaguarda de los juegos televisados a nivel nacional. La liga protegió 22 juegos de TV nacional de marquesina de modo que ninguno de los dos equipos esté jugando partidos seguidos, cuatro juegos en cinco días, cinco juegos en siete, o viajando más de 3,500 millas en la semana que precede al juego. Es un cambio dramático en la liga.

Tenga en cuenta que la temporada pasada los Warriors jugaron cuatro de sus cinco partidos en ABC en días de juego seguidos. ¿Esta temporada? Ninguno de sus seis juegos en ABC están en un sistema espalda con espalda. De hecho, ningún equipo en un juego de ABC jugará la segunda noche de un juego espalda con espalda. Para los Cavaliers, solo dos de sus 27 juegos de TV nacional están en la segunda noche de un partido seguido, un tercio del total de la campaña anterior.

Después de una temporada marcada por niveles históricos de triples-dobles y descansos, la liga significa negocio. ¿Pero puede ser contraproducente?

Los equipos toman el calendario

¿Qué está creando más zumbido entre los ejecutivos de los equipos es cómo la liga planea hacer de policía en los descansos en el nivel de la liga? Los ejecutivos de los equipos confirmaron un reporte de USA TODAY de la semana pasada en el que se espera que pronto los dueños acepten las nuevas reglas para penalizar y manejar estrategias excesivas de descanso de jugadores. Silver ha dado a conocer que prefiere que los equipos no descansen a múltiples estrellas a la vez, y si se toman una noche libre, lo hagan en casa donde los fanáticos tienen múltiples oportunidades para ver esas estrellas de grandes entradas.

Eso es justo. Pero tales castigos y regulaciones preocupan a varios instructores, personal de la ciencia del deporte y ejecutivos quienes hablaron con ESPN.com. A sus ojos, la liga debe de ser aplaudida por inyectar más días de descanso en el calendario y el reconocimiento de la necesidad de promover la salud del jugador por encima de todo.

Pero legislar la salud fuera de la sala del entrenador desde las oficinas de Nueva York es un terreno complicado. Nadie entiende las necesidades médicas de los jugadores más que los doctores y entrenadores que a menudo pasan más tiempo con los jugadores que con sus propias familias. El personal le brinda a los jugadores la noche libre por una razón muy sólida: protege a los jugadores contra lesiones que podrían torpedear su temporada o, peor aún, toda la franquicia entera (ver: Derrick Rose y los Chicago Bulls).

Lo que se pierde en la indignación del descanso es que la liga acaba de ver su temporada más saludable en más de una década. Según un estudio exhaustivo realizado por InStreetClothes.com, la NBA registró el menor número de juegos perdidos debido a una lesión desde la campaña 2005-2006. Los equipos se sienten orgullosos de esa cifra, incluso si se trata de niveles saludables que registran récords (e incluso si consideras que los descansos son lesiones, la temporada 2016-2017 fue certificado de buena salud).

Ahí radica la contradicción: ¿Debería la liga castigar a los equipos por proteger a sus jugadores de lesiones? Pero en lugar de obligar a los entrenadores a hacer la llamada de descanso, la liga lo está haciendo por ellos.

El impuso analítico de la liga

Parece que el propio Silver es plenamente consciente del valor del descanso como estrategia. El comisionado ha admitido en múltiples ocasiones que hay un vínculo entre la fatiga y las lesiones. Antes de los juegos entre los Warriors y los Cavaliers en las Finales del 2017, dos equipos que tuvieron más descanso de titulares que ningún otro, Silver defendió la práctica de la prevención de las lesiones a través del descanso estratégico.

“Y también diría de vuelta a los aficionados”, dijo Silver, al dirigirse a la protesta de la audiencia con respecto al descanso. “Que aquí vamos a las Finales con el número uno en el Oeste, con el número dos del Este, dos equipos que obviamente tuvieron unas tremendas temporadas regulares y cada jugador está sano.

“Así que no necesariamente creo en los beneficios de alguna manera si la liga requiere un juego a un jugador que no está lesionado pero fue golpeado, para jugar cuando los entrenadores sintieron que el jugador necesitaba descanso. No creo que el beneficio al requerir que ese jugador juegue y luego ese jugador se lesione".

Está claro que la liga está tomando el asunto en sus propias manos. Durante tres décadas, la liga empleó al Vicepresidente Senior de Programación y Operaciones de Juego, Matt Winick, para hacer el calendario a mano. Pero en 2014, la liga decidió llevar ese proceso al siglo 21 que parecía erradicar el desagradable cuatro juegos en cinco días y los espalda con espalda.

Liderado por Evan Wasch, el vicepresidente senior de estrategia y analítica de baloncesto de la NBA, y Tom Carelli, vicepresidente senior de radiodifusión de la NBA, la liga optimizó su calendario con un software para reducir ineficiencia en la lista de 1,230 juegos.

Las mejoras están por todas partes. Por ejemplo, habrá 17 juegos en ABC esta temporada y ninguno de los equipos estará en un segundo juego seguido cuando juegue. Cuando Kerr descansó a sus estrellas ante los Spurs el 11 de marzo, fue la segunda noche de juegos seguidos. No solo eso, el equipo había viajado a ocho ciudades para nueve partidos durante un lapso de dos semanas.

“Es realmente loco”, dijo Kerr antes del partido. “Este es el peor calendario del que he sido parte”.

Los planificadores estuvieron de acuerdo. No hay tales estiramientos en el horario para los Warriors o cualquier otro equipo. Antes de la temporada 2014-2015, destacamos los 10 más agotadores serie de cuatro juegos en cinco viajes en el calendario de la NBA.

Tres años con el software analítico, ni uno solo permanece en el calendario. Felicitaciones a la NBA.

¿El final del descanso?

Algunos ejecutivos no esperan mucho para cambiar la siguiente temporada. Son escépticos de que las nuevas reglas relativas a los descansos tendrán el efecto deseado. Seguro, los descansos pueden bajar, pero el uso estratégico probablemente seguirá siendo el mismo.

¿Cómo? Múltiples equipos sugirieron este escenario: si un equipo necesita descasar a un par de jugadores en partidos de marquesina para prevenir lesiones relacionadas con la fatiga, la oficina principal simplemente pondrá una lesión simulada para evitar ser castigado. El número de reportes de descanso será “mucho menos por esta razón”, dijo un veterano gerente general de la NBA.

Nos reímos cuando el entrenador de los Spurs, Gregg Popovich, el pionero de los descansos de las estrellas en la NBA para mantenerlos saludables, catalogó a Tim Duncan como “DNP-Old” en una ficha. Pero si Curry necesita una noche fuera durante un largo viaje con múltiples juegos seguidos, no hay nadie que detenga a los Warriors para citar “dolores de espalda” o “tendinitis de Aquiles” en el informe de las lesiones. Tal práctica no sería nueva. En las eras anteriores, el personal de entrenamiento a menudo enumeró a las lesiones para mantener a los jugadores en la lista de lesionados sin tener que renunciar a ellos.

Mientras los fans rodean el calendario para los juegos principales en estos días, ejecutivos y entrenadores están dando vueltas a sus propias fechas -pero para potenciales días de descanso en el calendario-. Incluso con los nuevos ajustes en el calendario, el equipo todavía está usando el mes siguiente para planear sus días de descanso.

“Estoy buscando juegos”, dijo un alto ejecutivo a ESPN.com el lunes por la noche. “Donde podríamos sentar a chicos si es necesario”.

La liga se da cuenta rápidamente que este calendario no es perfecto. Considere a los Houston Rockets jugando con los Golden State Warriors el 4 de enero por TNT. Para los Rockets, será la segunda noche de juegos seguidos y el quinto juego en siete noches -a través de las vacaciones del año nuevo-. No es el escenario ideal para quizás el partido más esperado de la temporada. Cuando se programan 82 jugos en 176 días, este tipo de parches son inevitables, incluso con la semana extra incorporada.

Los Rockets serán un equipo fascinante para ver cómo tratan los días de descanso de Harden y Chris Paul esta temporada regular. El equipo quiere legitimarse como un verdadero competidor por el campeonato. ¿Puede hacerlo mientras intenta que el dúo juegue los 82 partidos? Harden se enteró de la manera más dura, solo tomando un juego de descanso en la temporada 2016-2017 y una acalorada serie ante los Spurs en las semifinales de la Conferencia Oeste.

Por otra parte, es difícil imaginar a un jugador que sea ha condenado más a sí mismo por una lesión en la postemporada que compañero de equipo, Chris Paul.

En total, la expectativa en torno a la liga es que los descansos continuarán siendo un arma para los equipos para combatir en la temporada de la NBA. Después de todo, hay más de 400 juegos seguidos que permanecen en el calendario y hasta que el número baje a cero, los equipos sacarán a su jugadores de vez en cuando cuando sus diagnósticos lo digan.

Los equipos principales todavía darán prioridad a la salud en la temporada regular para la caza de un campeonato como los fans y los medios de comunicación aullar sobre los anillos y el legado. Eso probablemente no cambiará. Pero eso no significa que la NBA no pueda hacer algo al respecto. Los descansos no se van. Pero hablar menos de estrellas en la banca es una buena cosa.