ATLANTA – Brad Stevens, entrenador de los Boston Celtics, no va a permitir que su equipo se duerma en los laureles tras sus 14 victorias consecutivas, y él sigue sugiriendo que sus pupilos podrían no llegar a ser tan buenos como su marca lo indica.
“Nosotros no hemos jugado lo suficientemente bien como para considerar a esta racha ganadora como válida, en mi opinión”, Stevens dijo el sábado por la mañana durante el precalentamiento de Boston en el Philips Arena.
“Hemos encontrado maneras de ganar partidos, pero debemos jugar mucho mejor”.
Los Celtics han llamado la atención de la liga con su racha ganadora de dobles dígitos tras comenzar la temporada 0-2 y diezmados por la lesión en el tobillo que marginó a Gordon Hayward por el resto de la temporada.
Cuando Boston derrotó a los Golden State Warriors, campeones defensores de la NBA, limitando a la mejor ofensiva de la liga a unos meros 88 puntos el jueves pasado, esa atención llegó a su pico más elevado y varios se preguntan si los Celtics son el nuevo mejor equipo de la Conferencia Este.
Stevens está contento con la manera en que su equipo se las ha rebuscado para ganar, pero no quiere que los resultados les prevenga seguir mejorando considerando que van vigesimoterceros en rating ofensivo.
“Debemos ser mejores, y lo sabemos”, dijo Stevens. “Nosotros no podemos distraernos tanto con los resultados de todos estos juegos y dejarnos llevar por esa emoción. Hemos sido afortunados de ganar muchos partidos, incluyendo el jueves por la noche. Si nosotros seguimos perdiendo por 17 puntos noche tras noche, no nos vamos a divertir tanto como lo venimos haciendo”.
Los Celtics han remontado desventajas de 17 puntos o más tres veces durante su racha, incluyendo dos de 17 puntos en un mismo juego contra los Warriors. Boston también iba perdiendo por 18 en Oklahoma City y por 18 en Charlotte durante un compromiso que Kyrie Irving se vio obligado a abandonar temprano con una fractura en la cara cuando el equipo ya no contaba con Hayward y Al Horford aquella noche.
Boston se ha apoyado en su defensa, la mejor de la NBA, al permitir apenas 95.4 puntos cada 100 posesiones. Esos son tres puntos menos que la segunda mejor defensa (Oklahoma City, 98.6) y siete menos que su escolta en el Este (Miami, 102.4).
Los Celtics enfrentarán a tres rivales que cuentan con marcas perdedoras durante una gira de tres partidos fuera de casa que arranca este sábado en Atlanta (3-12) y continúa el lunes en Dallas (2-14) . Sin embargo, Stevens claramente está convencido de que su equipo estará en problemas si llega a subestimar a cualquiera de sus oponentes.
“Yo pensé que jugamos muy intensamente el jueves, batallando en defensa y todo eso, pero si atacamos al mismo nivel que el jueves por la noche vamos a perder [en Atlanta], dijo Stevens.
“Tenemos mucho que mejorar. Tuvimos una práctica de una hora y probablemente no contamos con el tiempo necesario para hablar al respecto”. Irving, quien volverá a utilizar la máscara protectora tras descartarla durante la segunda mitad el jueves contra los Warriors, respondió una pregunta sobre cómo se siente que los Celtics ahora cuentan con un blanco en la espalda.
“¿Ahora tenemos un blanco en nuestra espalda?”, preguntó Irving. “Es una gran perspectiva. Es divertido. Pero nuestra concentración no está necesariamente enfocada en eso. Yo ni creo que nos vemos de esa manera. Tomamos las cosas un juego a la vez y entendemos lo importante que es aprovechar los partidos para los que podemos prepararnos”.
Jaylen Brown, quien viajó por si solo el viernes para antes velar la muerte de su mejor amigo en Atlanta, estuvo presente en el precalentamiento del equipo y es probable que juegue este sábado. Él anotó 22 puntos el jueves contra Golden State, apenas horas después de enterarse del fallecimiento de su amigo.