El libro sobre cómo marcar a Giannis Antetokounmpo sigue en evolución.
Cuando los Milwaukee Bucks se enfrentaron a la defensiva de élite del Utah Jazz a principios de mes, el plan del entrenador Quin Snyder era darle a Antetokounmpo una importante marcación frente al perímetro para evitar que éste intentara penetrar. Tan pronto eligiera disparar, su defensor se acercaría para disputar en vez de retarle a lanzar. Cuando Antetokounmpo soltó un triple que calló a la multitud presente en el Vivint Smart Home Arena, un scout reposó en su silla y se puso las manos en la nuca.
"Cuando pueda encestar consistentemente de esa forma", expresó el scout, "será imposible de marcar".
A sus 24 años, Antetokounmpo ya ha sido designado como el Jugador que ha experimentado mayor mejoría en la NBA y capitán del equipo All-Star. Además, es considerado actualmente como fuerte candidato al Más Valioso. De forma increíble, se ha convertido en uno de los jugadores más populares y dominantes de la NBA durante la era dorada del triple sin contar con un tiro confiable a larga distancia. Su progreso como encestador esta temporada, bajo la cuidadosa guía del entrenador Mike Budenholzer y un estímulo sin fin, sugiere que la toma del mundo del baloncesto por parte de Antetokounmpo apenas está comenzando.
"Cuenta en un 100 por ciento con luz verde para encestar", dice Budenholzer.
Previo al mes de marzo, Antetokounmpo había mejorado su porcentaje de triples durante cada mes de la presente temporada, llegando al 40 por ciento en febrero. También ha hecho progresos notables en triples con salto, arma clave para un primer manejador del balón. Durante el año 2018, Antetokounmpo encestó apenas el 5.6 por ciento de sus triples en tiros brincados, lo cual lo ubicaba en el último puesto entre 76 jugadores con al menos 15 intentos de este tipo. Desde el 1 de enero, está convirtiendo el 36.8 por ciento (7-19) en triples en salto. Aún no puede ser descrito como un buen encestador de triples, pero un jugador con tantas otras destrezas solo necesita mantenerse confiado y ser competente.
"Realmente me siento confiado de que el balón entrará en la cesta", expresó Antetokounmpo recientemente. "Obviamente, se ve bien cuando el balón entra en la cesta. Te sientes mucho mejor con respecto a ti mismo. Al final del día, he estado trabajando al respecto".
"Tal como he dicho en el pasado, mis compañeros, el staff de entrenadores quieren que lance el balón. Quiero seguir encestando el balón".
Si bien Antetokounmpo ha hecho ajustes a su tiro desde su temporada de novato, su concentración en los triples se incrementó durante ese verano de 2018. Los Bucks experimentaron un cambio de entrenador y con ello, un cambio filosófico con respecto a la forma en la cual Antetokounmpo debía ser utilizado a la ofensiva.
El exentrenador de los Bucks, Jason Kidd, era mucho más cuidadoso con su tratamiento del enceste de Antetokounmpo, especialmente a principios de la carrera del griego. Durante su segunda temporada, apenas el 6 por ciento de sus cestas eran triples. Este año, esa cifra se ha incrementado hasta llegar al 15 por ciento.
Dicho incremento no ha sido mero accidente: Budenholzer ha reiterado que, sin importar cuantas veces los intentos de triples de Antetokounmpo terminen rebotando con el tablero o queden lejos del aro, debe seguir insistiendo en lanzar a larga distancia. Y no solo es el caso de Antetokounmpo. Budenholzer ha transformado a los Bucks, equipo que se ubicaba en el puesto 27 en triples convertidos por partido en el torneo anterior para ahora estar en el segundo lugar de la categoría en la actual temporada.
"Puedes ir a cualquier partido y entender con cuál espada vas a morir", expresó Brett Brown, entrenador de los Philadelphia 76ers el pasado domingo, antes de que Antetokounmpo explotara para conseguir 52 puntos (tope personal de su carrera) y convirtiera tres de ocho intentos de triples, mayor cifra de su devenir en la NBA. "Tienes que elegir tu nivel de tolerancia. Hay ocasiones en las cuales intentarás absorber sus incursiones en las cuales no podrás salir a marcar su intento de triple".
"Uno termina eligiendo el veneno con el cual morir".
La filosofía de Budenholzer con la cual asume el enceste de Antetokounmpo se deriva en su creencia sobre el poder de la creación de espacios. El entrenador asistente de los Bucks responsable de enceste Ben Sullivan hizo recientemente un diagrama de esta visión en una pizarra: Antetokounmpo, con cuatro encestadores a su alrededor, alejando suficiente atención de la pintura cuando se acerca al perímetro que termina creando espacios amplios para que sus compañeros corten y penetren.
"Esto ahora libera espacios para sus compañeros", indicó Sullivan. "Hace que todo el equipo sea más difícil de marcar cuando él no tiene el balón. Antes de que asumiera el puesto, Bud analizó al equipo (las debilidades y fortalezas de todos) y dice: 'Giannis es uno de los mejores jugadores de la liga. ¿Cómo ayudamos a que Giannis sea aún mejor?'"
"Necesitamos darle espacio a Giannis y hemos intentado ejecutar esa visión desde entonces. Tenemos que seguir haciendo ajustes y hacerlo mejor y más difícil de marcar".
Juntos, Sullivan y Antetokounmpo han invertido horas en el gimnasio perfeccionando el tiro de Antetokounmpo. Los Bucks denominan a sus ejercicios personalizados "las vitaminas" porque "las ingieren a diario". Las vitaminas de Antetokounmpo incluyen una fuerte dosis de enceste.
Si bien Antetokounmpo es una persona orientada a las rutinas, Sullivan incorporará a la mezcla varios creativos para así romper con la monotonía de ubicarse al borde del área y hacer tiro tras tiro. En ocasiones, Sullivan colocará una silla de oficina en la cancha para que Antetokounmpo intente encestar sentado. En otras, Sullivan instruirá a su pupilo para que intente disparar con dirección a los ojos del logo de los Bucks montado en la pared a 20 pies de altura.
"Ya es uno de los principales jugadores en la NBA", dijo Sullivan. "Trabajar en el tiro y mejorar ese tiro solo ayudará a elevar ese nivel. ¿Cuál es el relato que siempre oyen? 'Si Giannis pudiera encestar, sería indetenible. Imposible de marcar'. Él ya es imposible de marcar. Si pudiera encestar mejor, sería aún más imposible de marcar".
Antetokounmpo aún tiene trabajo de verdad para hacer a fin de convertirse en una amenaza consistente en las cestas a larga distancia. Si bien está intentando la mayor cantidad de tiros para tres puntos de toda su carrera, su éxito aún se limita a un 25 por ciento de enceste esta temporada producto de una cantidad relativamente pequeña de intentos. No obstante, Antetokounmpo y los Bucks se concentran menos en esa cifra de eficiencia en blanco y negro, más enfocados en su crecimiento a largo plazo en lo que respecta a comodidad y confianza para encestar.
"Aspiramos que, cuando clasifiquemos a los playoffs e importe más, pueda convertir algunas cestas", dice Antetokounmpo.
Desarrollar consistencia a larga distancia justo a tiempo para los playoffs podría ser una meta sumamente ambiciosa para Antetokounmpo, quien es la presencia más dominante de la liga en la pintura. Los rivales preferirían poner a prueba su rango de enceste cuando la temporada esté en juego, en vez de conformarse con verle penetrar.
Sin embargo, cuando esa cesta de 3 puntos se convierta en un arma confiable, el viejo manual sobre cómo marcar a Antetokounmpo quedará obsoleto y ya no seguirá siendo útil para las defensivas que intenten marcar a alguien imposible de marcar.