Leones del Escogido no solamente fue el equipo del año 2016, sino que también el conjunto más ganador de los últimos 10 años en la pelota invernal de República Dominicana.
Los Leones comenzaron y terminaron el año haciendo lo que mejor saben hacer en los últimos tiempos y que hizo merecedor del mote ''Duro de Matar'' al equipo rojo: Ganar cuando más se necesita.
El Escogido, que ha ganado cuatro de los últimos siete torneos de la liga quisqueyana (2009-10, 2011-12, 2012-13 y 2015-16) aseguró la defensa del título que conquistó en enero, avanzando al round robin semifinal del torneo 2016-17 con el último boleto de playoffs antes del descanso de la Nochebuena.
Los melenudos ganaron seis de sus últimos siete partidos, incluyendo uno decisivo el último día de la temporada regular contra las Estrellas Orientales en el estadio Tetelo Vargas de San Pedro de Macorís, el jueves pasado, para dejar a los verdes en el camino, pese a que alinearon por primera vez en la temporada al estelar intermedista Robinson Canó.
El Escogido (25-25) terminó la temporada regular de este año empatado con Águilas Cibaeñas en el tercer lugar del standing, detrás de Gigantes del Cibao (27-23) y Tigres del Licey (26-24) y por delante de Toros del Este (24-26) y Estrellas (23-27).
Al quedar fuera de la competencia, las Estrellas aseguraron extender a 48 años su sequía de títulos, el mayor tiempo de espera en la historia de la liga.
Guardar lo mejor para el final ha sido la marca del Escogido desde que tienen a Moisés Alou como gerente general y a José Miguel Bonetti y Eduardo Najri al frente de la oficina central. En la ''Era Alou-Bonetti-Najri'', el equipo capitalino ha clasificado a la postemporada en siete de ocho torneos --incluyendo el actual--, disputó cinco finales (cuatro ganadas) y conquistó dos de sus cuatro Series del Caribe (Isla Margarita 2010 y Santo Domingo 2012).
En enero, el Escogido ganó sus últimos cuatro partidos del round robin semifinal para avanzar a la gran final contra su poderoso vecino del estadio Quisqueya Juan Marichal, Licey, que ganó 12 de los primeros 13 encuentros del playoff de 18 juegos, estableciendo un récord de todos los tiempos y clasificando fácil a la disputa del campeonato quisqueyano.
Cuando los dos equipos de Santo Domingo chocaron en la final, se esfumó el poderío del Licey, que no pudo contener el impulso con que llegó el Escogido. Los Leones ganaron los primeros cuatro partidos y dominaron 5-1 el playoff al mejor de nueve choques para coronarse campeones con poca oposición del club más histórico del país.
Luis Rojas, el hermano menor de Moisés, emuló a su padre, el legendario Felipe Alou, como dirigente campeón de los rojos.
En la Serie del Caribe, que se celebró en su propio parque, el Escogido --ahora como República Dominicana-- perdió sus cuatro compromisos contra los Venados de Mazatlán (México), Tigres de Aragua (Venezuela), Cangrejeros de Santurce (Puerto Rico) y Tigres de Ciego Ávila (Cuba). Los Venados fueron los campeones de la pequeña Serie Mundial Latinoamericana, tras vencer en la final a los Tigres venezolanos.
Pero lo ocurrido en la Serie del Caribe no empañó el brillo de los Leones, que comenzaron el año conquistando su título #16 y lo terminaron avanzando a la postemporada, dándose la oportunidad de tratar de reconfirmar que es ''Duro de Matar'', su apodo de la última década.