TAMPA, Florida - Los Yankees de Nueva York están contemplando seriamente bajar al hombre de los 153 millones de dólares, Jacoby Ellsbury, al fondo de la alineación en esta temporada.
Desde que Ellsbury ha sido un yanqui, casi siempre ha bateado en los primeros tres lugares del line up, a pesar de ser apenas un jugador promedio. Parece como si su contrato de siete años pudiera caer como el peor fichaje de un agente libre en la historia de la franquicia.
La caída potencial de Ellsbury en calidad continúa la pendiente descendente en su carrera con los Yankees, lo cual deja difícilmente imaginarse un final feliz con cuatro temporadas más que le restan de contrato y con su cumpleaños 34 llegando en septiembre.
Esta temporada, los Yankees están pagando a Alex Rodríguez $ 21 millones por no jugar, según los términos de su contrato final de 10 años y $ 275 millones. El propietario Hal Steinbrenner ha demostrado que el equipo asumirá ese dinero si no hay mejor opción.
El tiempo de Ellsbury con los Yankees ha sido francamente aburrido, con pocos puntos memorables y calentando la banca en los juegos principales. No ha construido ninguna empatía con el equipo.
Los Yankees han jugado en sólo un partido de playoff en los tres años de Ellsbury en el Bronx, y Ellsbury, con un zurdo en el montículo, no fue titular. En septiembre pasado, cuando los Yankees seguían peleando por un lugar en la postemporada, Ellsbury fue al banco en algunos partidos importantes contra zurdos, ya que el manager Joe Girardi estaba a favor de otro bateador zurdo, Brett Gardner. Ahora, Gardner -con habilidades similares, pero en un contrato de tres temporadas menos y casi $ 100 millones menos-- podría ser el elegido en la parte superior del orden, con Ellsbury cerca de la parte inferior, probablemente en el séptimo turno.
El año pasado, Gardner tuvo un .351 OBP comparado con el .330 de Ellsbury cuando ellos batearon en uno de los dos primeros dos turnos de la alineación. Gardner también vio más lanzamientos por comparecencia (4.1 a 3.7). Girardi valora la idea de separar a los dos en la alineación, que por lo general en su templado lenguaje mediático significa que va a hacerlo. Es difícil encontrar una razón convincente por la que Ellsbury derrotara a Gardner por un lugar en la parte superior de la alineación.
"Vamos a evaluar a medida que avanzamos", dijo Girardi, dejando abierta la posibilidad de mantener a Ellsbury y Gardner en la parte superior del orden.
Esta primavera los Yankees tienen una amplia cantidad de prospectos en los jardines y ninguna lealtad histórica hacia Ellsbury. Si Ellsbury no mejora su juego -y con Aaron Judge y Clint Frazier llamando a la puerta del Yankee Stadium- la próxima democión de Ellsbury podría ser al banquillo. La edad, claramente, no está de su lado.
"Ni siquiera dejo que eso entre en mi mente", dijo Ellsbury. "Todavía tengo velocidad. Todavía tengo explosividad. Así es como lo veo. Trato de no mirar a la edad, apenas cómo el cuerpo se siente y el cuerpo se siente bien".
Los Yankees y Ellsbury esperan que haya cierta chispa en ese cuerpo, porque aún no ha proporcionado una sola temporada en proporción con su salario anual de casi 22 millones de dólares.
"Todavía creo que hay más en el tanque de Jacoby Ellsbury para nosotros", comentó el gerente general de los Yankees, Brian Cashman.
El contrato de siete años de Ellsbury, de $ 153 millones, compite por lo peor de la historia de los Yankees. Su enorme fragilidad, una reacción exagerada a la inminente pérdida de Robinson Canó en el invierno de 2013, probablemente le dará la ventaja sobre la infamia de Ed Whitson, Carl Pavano y Kei Igawa en los Yankees. (No es que alguien debería sentirse mal por Ellsbury, ¿quién no querría ser pagado en exceso?)
Dos días después de la Navidad de 1984, Whitson firmó un acuerdo de cinco años y $ 4.5 millones. Tuvo balance de 15-10, con una efectividad de 5.38, en poco más de una temporada -y fue a la guerra con su capitán, Billy Martin, y los enojados fans de los Yankees- antes de conseguir ser enviado de nuevo a San Diego en julio de 1986 por el relevista veterano Tim Stoddard. En 2004, Pavano firmó por cuatro años y casi $ 40 millones, luego fue calificado "American Idle" (El Americano holgazán) por el New York Post después de hacer sólo 26 aperturas en tres temporadas (y tampoco muchas salidas buenas, ya que colocó un 5.00 de efectividad vistiendo el uniforme a rayas). Igawa fue firmado por cinco años y $ 20 millones -sin incluir una cuota adicional de $ 26 millones que pagó al ex equipo de lanzador japonés, los Hanshin Tigers -en lo que resultó ser una respuesta tonta a los Medias Rojas que ganaron la puja por Daisuke Matsuzaka en 2006. Igawa lanzó un total 71⅔ entradas en Grandes Ligas, con un récord de 2-4 junto con una efectividad muy desagradable de 6.66.
Los tres están juntos entre los contendientes dignos, pero la producción absolutamente media de Ellsbury y el juego apagado le otorgan la ventaja debido al valor y a la longitud de su contrato.
En sus tres temporadas en el Bronx, ha bateado .264 con un porcentaje de embasamiento de .326, ambos por debajo de los totales de su carrera de .297 y .439 entrando en el contrato. Ha robado sólo 80 bases -10 más que robó en una sola temporada, en 2009, con los Medias Rojas de Boston. Él ha bateado 32 jonrones en tres temporadas como Yankee, que es la misma cantidad que golpeó en 2011 en Boston, el año que parecía justificar su fichaje por una gran suma. Ellsbury persigue bolas en el jardín central, pero lanza peor que un mariscal de campo de los New York Jets.
Encima de esto, Ellsbury no trae química al equipo. Es tan invisible en el clubhouse como en el campo. Él no es un líder, por lo general el papel de los jugadores mejor pagados. Cuando las cosas iban mal, Derek Jeter casi siempre estaba allí para responder a las preguntas difíciles. Es parte del trabajo para los pesos pesados de Yankees para comunicarse con los aficionados. Ellsbury rara vez está en el clubhouse, especialmente cuando los grandes jugadores están siendo responsabilizados.
Incluso Hal Steinbrenner ha puesto a Ellsbury ligeramente en alerta, aunque de una manera mucho más tímida de lo que su padre lo haría con tal contrato.
"Jacoby es un gran jugador", dijo Steinbrenner. "Él viene a jugar todos los días. Las estadísticas son lo que las estadísticas son. Pero me ha gustado tenerlo en el club".
¿Steinbrenner disfrutaría tener a Ellsbury en el club por otros cuatro años? Si es degradado en el orden de bateo, el siguiente paso lógico es sacarlo completamente fuera de la alineación inicial, luego el banquillo y luego...