'Bud' acabó en nueve rounds a Errol Spence y se consolidó como el mejor boxeador del mundo en la actualidad
Con una sólida exhibición el martes, Naoya Inoue puso alta la bandera para arrebatarle el trono libra por libra del boxeo profesional, pero el sábado pasó una tormenta de emociones llamada Terence Crawford que no sólo acabó con Errol Spence, sino también con las dudas de quién merece ser el ocupante de ese trono.
Lo de Crawford fue una actuación portentosa. Ver a Errol Spence combatir de la manera que lo hizo era por momentos inimaginable, producto de un talento extraordinario por parte de su rival.
Ese upper que mandó a la lona a Errol en el segundo round fue apenas el comienzo de lo que terminó siendo un espectáculo de demolición. Tres caídas después y con la arena rugiendo, Terence obligó al réferi a detener el combate, no había más que hacer y por lo que vimos anoche, una revancha no luce como la mejor opción para el de Texas.
Decir que Terence es el mejor libra por libra del mundo no significa que Naoya sea malo, de hecho, habrá que celebrar el momento, porque ahora todos esos peleadores ahí arriba van a tener que competir todo el año por esa corona intangible.
Y si alguien quiere mantener a Naoya ahí arriba, tampoco hay problema, es un talento único, y al final es un ranking subjetivo, sin embargo, hay que darle valor real a la victoria de Crawford ante otro de los mejores cinco libra por libra, sólo por eso, en mi lista está hasta arriba.
Se fue una semana grandiosa de boxeo profesional, una Navidad en pleno mes de julio. Inoue y Crawford hicieron ver 'terrenales' a Stephen Fulton y Errol Spence.
A Nonito Donaire le cayeron los años y perdió ante el flamante nuevo campeón Gallo del Consejo Mundial de Boxeo, el mexicano Alejandro 'Peque' Santiago que hizo una gran pelea de la mano de la familia Quirarte en la esquina. Al 'Pitbull', Isaac Cruz, no lo dejó lucir Gio Cabrera, pero de eso a una decisión dividida y cerrada, nunca.
Tuvimos el honor de ser testigos de la historia, de ver cómo Crawford escribió su nombre con letras de oro al ser el primer peleador dos veces campeón indiscutido en esta era de los cuatro organismos. Y desde ya nos alistamos para una guerra, que este 12 de agosto viene Emanuel Navarrete ante Óscar Valdez.