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Boxeo, influencers y polémica: ¿ayudan o perjudican?

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Jake Paul, más cerca de cumplir su sueño: pelear por un título mundial (2:14)

German García analiza el triunfo por decisión unánime de Jake Paul sobre el exmonarca Julio César Chávez Jr. (2:14)

Youtubers: ¿ser o no ser? ¿To be or not to be? Hamlet no tenía la respuesta y nosotros tampoco, pero da toda la sensación de que llegaron para quedarse.

Y, si no, preguntarle a Jake Paul, convertido hoy no solamente en empresario, sino en estrella. Pagan por verlo. Para elogiarlo o criticarlo, no importa.

Ya se anuncia una exhibición de Jake Paul ante Gervonta Davis. Pero no hay que olvidar que, además, hace mucha campaña para abrir nuevos gimnasios de boxeo y ayuda con elementos. "No se olviden: soy un promotor que no necesita dinero porque ya lo tiene…", nos dijo alguna vez.

Hace poco, Renato Bermúdez y Salvador 'Chava' Rodríguez dialogaron con Sergio 'Maravilla' Martínez en el canal de YouTube de ESPN KNOCK OUT y dejó muchas frases. "El movimiento es fantástico porque no deja de ser una expresión del boxeo. Ante todo, atrae a un público diferente que de otra forma quizás no se entusiasmarían por el boxeo. De esos millones de seguidores -sí, chicos, no tenga dudas, son millones-, muchos se preguntarán en algún momento cómo será ver boxeo “de verdad” y otros muchos -y muchas, ténganlo en cuenta- también querrán darse una vuelta por un gimnasio, aunque sea para ver qué pasa", dijo ´Maravilla'.

Los más tradicionales reniegan del fenómeno. "Distorsionan la esencia, no saben boxear y se parece más a un circo que a un espectáculo de verdad". Lo cierto es que, además de ser vistos por millones (Martínez no exagera), llenan estadios, atraen sponsors, generan discusiones y, en suma, no le hacen mal a nadie. "Eso siempre y cuando se observen las reglas", acota Mauricio Sulaimán, presidente del Consejo Mundial de Boxeo.

Y ese detalle, que no es menor, es el más necesario de todos. Y a las pruebas nos remitimos. Se calcula que unos 20.000 espectadores fueron al Palacio de los Deportes para lo que fue la edición inicial de Supernova Strikers 2025. Hubo de todo, streamers, figuras de internet y, además, con una sumatoria de espectadores que siguieron el show por streaming, DAZN y hasta una cadena de cines de México. "Como toda novedad atrae mucho, pero no digan que eso es boxeo. Hasta se habló de poner en el ranking a Jake Paul. Que genere millones no justifica ni a Paul ni a estos espectáculos", es la síntesis de quienes aman al boxeo clásico y se expresaron en las redes.

Y se puede decir que tienen razón y por ello mismo, se pueden ignorar los shows. Pero, como ocurre con el sol, lo que no se puede es taparlo con la mano.

Hasta hubo una argentina -cuándo no- que no solo tomó parte, sino que le ganó a la mexicana Mercedes Roa, convirtiéndose en la primera mujer ganadora del flamante torneo. Se llama Milica y su carta de presentación menciona a dos millones de seguidores por streaming y 3 por Tik Tok sin contar Twitch, con cerca de 200.000. ¿Eso justifica verla en un ring?

Desde un punto de vista clásico no, pero a ver… El Consejo Mundial aprobó las peleas siempre y cuando se hicieran todos los exámenes médicos necesarios. No se puede negar que es una actividad de alto riesgo y que no puede ni se debe tomar a la ligera.

No olvidar la reacción que provocó el rumor de que Jake Paul iba a ingresar al ranking del Consejo, pero tener presente que cuando el río suena… Ahora bien, ¿qué ocurre con un albañil, un estudiante de abogacía o una sicóloga si quiere boxear? Nada. Porque no se puede juzgar con prejuicios que les digan si a unos o unas y no a otros.

El fenómeno, mientras tanto, sigue creciendo. En Sevilla, el choque entre la streamer Abby y la influencer madrileña RoRo logró 8 millones de seguidores. Fue el 27 de julio con un espectáculo que además movió muchas más peleas y espectáculos musicales. Ganó Abby, de Palma de Mallorca, con su ventaja de 4 kilos (debió bajar 10 para la pelea) y 23 centímetros y más allá de que el fallo generó polémica, la conclusión fue que ganaron todos…

Ibai Llanos, influencer y organizador, hizo una inversión estimada entre cuatro y cinco millones de euros. Se calculó un ingreso por venta de entradas (80.000 tickets de 35 a 190 euros), 5 millones. Sponsors, 3 millones. Faltan los números por Twitch, pero lo cierto es que el cálculo ha sido más que positivo para Llanos, mientras las “boxeadoras” llevaron entre 30 y 60 mil euros cada una.

Si el negocio es bueno, ¿es bueno para el boxeo de verdad? Para un boxeador el camino a la fama no solamente suele ser largo. Es, además, muy duro, se va formando combate a combate y victoria tras victoria, arriesgando la vida en cada combate.

Es cierto que los streamers e influencers no tienen la culpa: son famosos y famosas antes de boxear, y si por hacerlo además reciben buenas pagas, mejor.

El tema quizás pase por no mezclar las cosas, cada uno por su camino, aunque 'Maravilla' Martínez piensa en un paso intermedio. "En Argentina, mi país, no va mucho público a ver boxeo", nos dijo hace un tiempo. "Tal vez, permitiendo que, en la misma velada y en forma separada haya combates de streamers, habría una convocatoria enorme como la ya la hubo y el boxeo seguiría siendo el mismo…", agregó.

En diálogo con nuestros colegas Renato Bermúdez y Salvador 'Chava' Rodríguez, Martínez anunció dos próximas exhibiciones: "Recuerden que en una exhibición también se puede perder o ganar por nocaut o salir lesionado". Martínez afirma que hoy el boxeo necesita de los streamers y de todo su público juvenil. Y no podemos menos que coincidir, por dos razones: una porque si no puedes con ellos, únete a ellos; y la otra porque el primer paso hacia la vejez es tenerle miedo a los cambios…