La comisión de boxeo en Gran Bretaña, mejor conocida como British Boxing Board of Control, envió una carta a los promotores del Reino Unido en la que especifica que el pugilismo profesional podría reactivarse en el mes de julio, y bajo estrictas medidas de salud y seguridad, que podría obligar a que no haya público en el lugar, test de coronavirus y el no permitir el acceso a las personas más vulnerables por este mal.
El boxeo en suelo británico se suspendió desde marzo. De hecho, no se culminó el torneo europeo que era clasificatorio rumbo a Tokio 2020 y el BBBofC tuvo que cancelar múltiples carteleras de boxeo profesional que ya se habían anunciado, incluida la pelea de Anthony Joshua y Kubrat Pulev. Hasta esta semana, no había una idea definida de cuánto podría reactivarse la industria, pero hubo ya humo blanco en las oficinas de ente rector.
“Dependiendo de las decisiones del gobierno, esperamos que el boxeo profesional pueda comenzar en julio de 2020, trataremos de hacer lo mejor para que suceda, y estamos trabajando muy de cerca con nuestros promotores”, se lee en la carta. “Inicialmente, es poco probable que se permita la asistencia de público a los lugares”, añadió.
Entre las medidas, se pedirá a los participantes a que tomen parte en un aislamiento obligatorio, se hagan pruebas de Covid-19 y que llenen un formulario específico avalado por las autoridades de salud. Se pedirá a todos los involucrados que manden al menor número posible de participantes, y no permitirán, por ahora, más de cinco combates por cartelera.
Algo que han dejado en claro, desde ahora, es que van a ser muy cuidadosos con los grupos de mayor riesgo por contagio del coronavirus, es decir, adultos mayores y personas embarazadas, todo de acuerdo a lo emitido con las autoridades de salud en el territorio. Además, las arenas o inmuebles que serán utilizados deberán ser certificados por la comisión, bajo un estricto proceso de sanitización.