Terminó el segundo fin de semana de la Fórmula 1 y Sebastian Vettel y Ferrari volvieron a ganar –desde 1983 quien gana las dos primeras carreras, gana el campeonato de pilotos. ¿Será que Vettel extienda la estadística?
Pero más allá de estas dos improbables victorias en Australia y Bahréin, Ferrari luce con la velocidad y la consistencia para ser un verdadero rival por los campeonatos, una verdadera fuerza revolucionaria que rete el statu quo.
“La buena noticia es que estamos cerca, en todas las condiciones”, dijo Seb luego de lograr la Pole para el GP de Bahréin –donde él no la lograba desde 2012 y Ferrari desde 2007, cuando ganó ambos títulos mundiales.
Sí, Vettel y Ferrari ganaron apenas, pero es muy revelador que hayan podido vencer a Mercedes en el Circuito Internacional de Sakhir, bastión del dominio de las Flechas de Plata desde que inició la era híbrida: primeras filas de salida en 2017, 2016, 2014; triunfos en 2016, 15 y 14. En otras palabras, Ferrari asaltó una fortaleza Mercedes y la conquistó.
En Sakhir se necesita tracción y potencia para salir de las cerradas curvas, además de buena velocidad final y buen balance aerodinámico y mecánico (chasis-suspensión) para trazar bien el trabado sector dos. Ferrari los tuvo todos y por supuesto queda la duda si es el mejor en todos los rubros, o al menos alguno. Creo que no, aún no, pero sí es lo suficientemente bueno para apretar a Mercedes y forzar el error.
Si en Australia Ferrari se vio beneficiado por las circunstancias, en Bahréin se pusieron en contra y aun así tuvieron resto con que contestar y no solo salvar el podio, sino ganar. El retiro de Kimi Raikkonen y el cambio de estrategia de Mercedes obligó a reevaluar el plan de acción con Vettel; desde el pitwall el equipo reaccionó rápido y se la jugó a una detención en pits con la llanta blanda, con la que hicieron 39 vueltas. “No sabíamos que pudiesen hacer eso”, digo encogido de hombros Valtteri Bottas, luego de ser derrotado con sus llantas medias de 37 giros.
Blandas de 39 giros vs medias de 37 y gana el compuesto más ‘debil’. Pirelli se presentó como inesperado aliado de los ‘rebeldes’. Los neumáticos no parecen degradarse como deberían y, más importante aún, no parece haber sustancial diferencia entre compuestos. Ya había tocado el tema Pirelli y no quiero ser reiterativo, pero es un tema vital para entender la F1.
Y FALTÓ RED BULL
Mercedes, pero Hamilton, sobre todo, quizá deberían festejar la tragedia de Red Bull. Ambos RB14 tuvieron que retirarse del combate, pero es seguro que su presencia hubiese repercutido en el desarrollo de la carrera y quizá en el resultado - ¿tenía Daniel Ricciardo con que luchar por el podio? ¿Max Verstappen hubiese luchado contra Hamilton toda la competencia? Estimulantes preguntas. Seguro la fuerza de RB no hubiese sido irrelevante.
Vettel lo tiene claro: “tres equipos y seis pilotos están muy, muy cerca entre ellos. Será muy importante mejorar y ser rápidos a donde quiera que vayamos”, dijo luego de la batalla de Sakhir y esa hipotética lucha entre Mercedes, Ferrari y Red Bull, es una buena noticia para los aficionados y Liberty Media.
Mercedes sigue siendo el equipo a vencer y el más fuerte, sí. Pero esta ‘toma de la bastilla’ por parte de Ferrari invita a pensar que la revolución ha iniciado… y eso que faltó un ‘rebelde’.