PHOENIX -- Los Washington Redskins no han abandonado la esperanza de firmar al quarterback Kirk Cousins a un contrato a largo plazo, also que el presidente del equipo , Bruce Allen, enfatizó el domingo en la noche. Cousins tiene la posición de fortaliza en términos de dinero, pero Allen dijo que el equipo aún un tiene otras opciones.
Claron, eso significa que este drama podría seguir hasta la próxima temporada muerta.
Uno de los riesgos para Cousins en estos momentos es que en su destino preferido -- los San Francisco 49ers -- podrían acabar con un nuevo quarterback en el Draft5. Si utilizan una selección alta, ese sería el tipo que los 49ers querrán como su quarterback del futuro. Y eso removería a Cousins de la ecuación. Eso no significa que otro equipo no le interesaría a Cousins, si es que está libre en la próxima temporada muerta.
Mantenga esto en mente si los Redskins usan la etiqueta con Cousins en el próximo año: Su lado podría apuntar hacia etiquetas del futuro como parte de su posición de fortaleza en términos de compensación. Eso terminaría el año que viene. Sin embargo, también pueden apuntar hacia algo más como posición de fortaleza: libertad absoluta para el 2019. Si Cousins juega bien en esta próxima temporada, eso es una amenaza real.
Juega para el beneficio de Cousins el esperar en este punto (lo que es bueno porque un contrato a largo plazo no está cerca) y esperar a ver como responde la franquicia tras una marca de 8-7-1 en términos de exito. Ver como la situación de la gerencia se desarrolla y en cuál dirección aparenta ir la franquicia. Ver como se desarrollan con Jay Grudan cantando las jugadas. Cousins se sentía a tiempo con Sean McVay los últimos dos años. Cousins puede ganar al jugar el juego de esperar en este punto. Los Redskins aparentemente piensan lo mismo.
Estas son los opciones de los Redskins para el 2018:
Etiqueta de franquicia: Es difícil imaginar que esto sea una solución realista. Si los Redskins utilizan la etiqueta con Cousins por un tercer año consecutivo, les costaría aproximadamente unos $34.5 millones. Digamos que el tope salarial sube quizás a $175 millones -- Cousins entonces ocuparía cerca del 20 por ciento del espacio. Eso es demasiado para solo un jugador. A Cousins claramente no le molesta la etiqueta, y si lo hacen en una tercera ocasión, significaría que Cousins se habría ganado aproximadamente $78 millones en tres años. Los Redskins podrían haberlo firmado por cinco o seis años por esta cantidad de efectivo. ¿Por qué pagar esa suma por tres años? Claro, utilizar la etiqueta de franquica otra vez le daría a Washington la opción de buscar un cambio.
Etiqueta de transición: Esta idea ha sido discutida como una posible opción, pero tiene sus problemas. Sería más barata que la etiqueta de franquicia, costando cerca de $28 millones. Con eso no hay problema. ¿Pero, qué pasa si otro equipo le hace una oferta que los Redskins no pueden igualar? No recibirían compensación alguna - ni siquiera una selección compensatoria en el Draft. Claro, esto la daría tanto a Cousins como a los Redskins la habilidad de conocer cuál es su valor real en el mercado, con el beneficio de tener la opción de igualar cualquier oferta.
Si no hay una oferta y Cousins juega bajo la etiqueta de transición, aún asía se habría ganado aproximadamente $72 millones en tres años.
Dejarlo que pruebe el mercado: Eso claramente sería como lanzar los dados. ¿Pero que pasa si los 49ers logran agarrar un quarterback (y que Jared Goff se desarrolle con los Los Angeles Rams para McVay)? Esos dos destinos principales se borrarían de la ecuación. Sin importar lo que pase, los Redskins y Cousins podrían optar por probar el mercado y Cousins recibiría un contrato más a la par con su situación entre otros quarterbacks. Para Cousins, vendría después de haver ganado $44 millones en efectivo garantizado y estaría en turno para otro pago jugoso. Para los Redskins, si logran convencerlo que se quede, aún hubieran pagado mucho dinero en los últimos dos años para conseguirlo de nuevo en lo que consideran es su valor real en el mercado.
Por otro aldo, ambas partes quizás piensen que habría llegado el momento para seguir sus respectivos caminos después de la próxima temporada. Los Redskins ya habrían recibido (potencialmente) tres años de buen rendimiento de su quarterback y podrían mirar hacia otras opciones. Cousins quizás llegue al punto que quiere fuera; es realista pensar que si Robert Griffin III hubiera registrado números similares, ya que le hubieran dado un contrato a largo plazo.
El ex gerente general Scot McCloughan estaba más o menos impresionado con Nate Sudfeld durante la temporada muerta y el campamento de entrenamiento, diciendo que en par de años sería el quarterback titular. Otro año con Cousins le permitirá al equipo ver si en efecto Sudfeld puede dar el brinco. Es lejos de un donqueo, sin embargo. Algo de esto además dependerá de lo que ocurra con el resto del roster, si están haciendo progreso en ambos lados. En ese caso, otro quarterback estaría entrando a una mejor situación que la que Cousins tuvo hace dos años (con una defensiva mediocre; el talento ofensivo, claro, era excelente). Los Redskins entonces recibirían una selección compensatoria en la tercera ronda de 2019.
Las opciones no son necesariamente buenas y en algunos casos, costosas, en dinero o en la pérdida de un buen quarterback. Pero es de la única manera en la cual los Redskins podrían tener el control de la situación.