<
>

Sólo Mike Glennon puede evitar una controversia de QBs en Chicago

CHICAGO -- El novato quarterback de los Bears, Mitchell Trubisky, dijo algo la noche del jueves que apagó cualquier potencial duda sobre una controversia con Mike Glennon.

“Mike es el titular. Este es su equipo”, afirmó Trubisky.

La duda, por cuánto tiempo.

El plan en Chicago siempre ha sido que Trubisky, segunda selección global del Draft de 2017, asuma algún día el papel como titular, pero el equipo ha expresado su preferencia de que Glennon sea quien dirija a su ataque en 2017.

Eso es lo más probable que suceda, pues Glennon tiene $16 millones garantizados para esta temporada, pero el desempeño de Trubisky ante Denver (18 pases completos de 25 para 166 yardas y un touchdown) eleva la presión sobre Glennon, quien tuvo un mal arranque de pretemporada.

“Uno debe poner las cosas en perspectiva. Estamos exactamente a un mes del inicio de la temporada y para mí, es bueno volver a jugar”, indicó Glennon tras el duelo ante Denver. “Debo acostumbrarme a ser titular y jugar con ese rol. (Necesito) un par de juegos de pretemporada para afinar y tengo confianza en lograrlo”.

Desafortunadamente para Glennon, los aficionados tienen la tendencia a perder la perspectiva en situaciones como esta.

Los Bears han buscado a un quarterback franquicia desde que Sid Luckman era el tituar en la década de 1940. Uno no puede culparlos por emocionarse por la forma en que Trubisky jugó ante Denver, especialmente desde que esos aficionados han sido forzados a sufrir tres temporadas consecutivas en el último lugar divisional y seis campañas en fila sin ir a Playoffs.

¿Trubisky jugó ante los reservas de Denver?

Sí.

¿Glennon tuvo que enfrentar a una mucho mejor defensiva?

Sí.

¿A los aficionados de Chicago les importa eso?

No.

Claro, los aficionados no son quienes toman decisiones sobre quiénes juegan o permanecen en el roster -- o no deberían -- y el coach John Fox no ha dado indicación alguna de que contempla hacer un cambio en la posición de quarterback de Chicago.

Sin embargo, Glennon es realista. Sabe que sólo es cuestión de tiempo para que Trubisky tome el mando. Simplemente no se puede retrasar lo inevitable.

“Cuando uno recluta a un jugador tan alto, inmediatamente supe que habría algo de controversia. No me voy a enfocar en lo que pasa afuera, me enfocaré en lo que sucede en el vestidor y con los coaches”, señaló Glennon.

“(Trubisky) jugó realmente bien. Nadie lo duda. Me impresionó que lo hiciera así en su primer juego en la NFL. Jugó bien, avanzó con el ovoide, corrió con él, lanzó un pase de touchdown a Victor (Cruz). Definitivamente jugó bien”, reconoció Glennon.

El actual quarterback titular de los Bears está en una posición difícil. Realmente necesita tener una mejor actuación en el próximo juego de pretemporada de Chicago en Arizona.

Si creen que un juego de pretemporada no importa para Glennon, piénsenlo otra vez.

Glennon no puede permitirse otra mala actuación. De otra forma, la presión por darle la titularidad a Trubisky aumentará hasta alcanzar el punto en el que los Bears, pese a sus mejores esfuerzos, serán incapaces de ignorarla.

En la NFL, juegan los mejores. Punto. Y Trubisky lució como el mejor quarterback de los Bears ante los Broncos, aunque haya jugado ante defensivas de segundo y tercer equipos.