Los Tampa Bay Buccaneers recibirán a los Chicago Bears el domingo como estaba planeado, anunció el equipo el martes.
Los Bucs, tras consultarlo con la NFL y las autoridades de la ciudad, están esperando la evaluación de los daños tras el Huracán Irma, mismo que pasó por la ciudad el domingo y el lunes. El Raymond James Stadium, donde disputan sus duelos como locales, fue utilizado durante el fenómeno por militares y cuerpos de seguridad como centro de reunión.
"Albergar el juego es importante para nosotros dado hemos pasado por mucho en los días recientes", mencionó Brian Ford, directivo de los Buccaneers en un comunicado. "Esperamos brindarle a nuestros aficionados y a toda la región la oportunidad de unirse este domingo para dar iniciro a la temporada 2017".
Los jugadores empiezan a regresar poco a poco dado que el aeropuerto internacional de Tampa Bay opera de forma limitada. Algunos miembros de la organización evacuaron hacia Charlotte y North Carolina el sábado; otros viajaron a otros estados previo en la semana.
El plan por ahora es que retomen las prácticas el miércoles. Su juego de la Semana 1 en Miami fue reagendado para el 19 de noviembre por el mismo tema.
Mientras tanto, los Jacksonville Jaguars todavía no saben si podrán jugar en casa ante los Tennessee Titans por las inundaciones que hubo en el área.
Doug Marrone manifestó que podrían mover la ubicación o posponerlo ya que desean ir "paso a paso".
Se espera que el equipo vuelva el martes y entrenen el miércoles tras quedarse en Houston después del triunfo ante los Texans.
Jacksonville, we're coming home. pic.twitter.com/ruTfdFXOBv
— #Sacksonville (@Jaguars) September 12, 2017
"Lo único que sé es que habrá gente monitoreando el estadio", comentó Marrone. "Revisarán los campos y más adelante nos darán un reporte sobre como están las cosas para que tengamos una idea y así decidir que día volveremos a Jacksonville".