LOS ANGELES -- El ex entrenador Jeff Fisher dice que "no me arrepiento de nada" sobre cómo todo terminó en su tiempo con los Los Angeles Rams y podría interpretarse como que le gustaría recibir un poco de crédito por como las cosas desde entonces han evolucionado, diciendo que dejó el equipo "muy bien montado".
Mirando hacia el partido entre Rams y los Tennessee Titans, equipos en los cuales Fisher fue entrenador en jefe por periodos extendidos, el ex entrenador participó en una entrevista de una hora con el programa de radio The Midday 180 en Nashville y habló sobre su más reciente patrono.
Fisher fue despedido después de su 13er partido de su quinta temporada con Rams en el 2016, que terminó con marca de 4-12 y el regreso de la franquicia a Los Angeles. Ahora, bajo el entrenador novato Sean McVay, los Rams tienen marca de 10-4 y pueden asegurar el primer título de división para la franquicia desde el 2003 con una victoria este fin de semana.
"Soy un gran fanático de los jugadores de los Rams", dijo Fisher a The Midday 180. "Son básicamente -- no quiero decir que son mis jugadores, pero tuve mucho que ver con ese roster. Los dejé bastante bien montados. Y Sean, como ha probado en un corto periodo de tiempo, es un gran entrenador joven. Y tiene la ofensiva corriendo, que es lo que necesitaban".
Los Rams no tuvieron marca mejor que 7-8-1 en las cinco temproadas de Fisher como entrenador en jefe. En ese tiempo, la ofensiva de los Rams no terminó mejor que 21ra en anotaciones y terminó en último lugar en todas las categorías ofensivas principales la temporada pasada.
Esta temporada, los Rams lideran la NFL en puntos, diferencial de puntos están en la 10ma posición en yardas por juego.
Fisher, quien tiene un hogar cerca de Nashvill y pasó el 2017 alejado de entrenar, dijo que está "muy, pero muy contento por los jugadores. Hicieron lo que querían hacer antes de yo irme".
Fisher dijo que las adiciones en la línea ofensiva del tackle izquierdo Andrew Whitworth y el centro John Sullivan, al igual que al trio de receptores Sammy Watkins, Robert Woods y Cooper Kupp han sido una gran razón por el éxito. También dijo que McVay ha hecho "un gran trabajo" con Jared Goff, quien tuvo un rol importante en que fuera seleccionado con el primer turno global en el draft de 2016.
Goff enfrentó todo tipo de problemas como titular en los últimos siete partidos de la temporada pasada, terminando con un rating de pasador de 18.3, que por mucho fue el peor en la NFL para quarterbacks que lanzaron por lo menos 200 pases.
Este año, bajo la tutela de McVay, Goff es el primer alterno para el Pro Bowl.
"Sabíamos que eso venía", dijo Fisher. "Fue por eso que hicimos un cambio con ustedes [los Titans] para conseguirlo, porque sabíamos que tenía ese tipo de potencial. Sentíamos que ambos quarterbacks tenían una oportunidad de ser quarterbacks de franquicia. Estábamos en lo correcto. Philadelphia consiguió el de ellos [con Carson Wentz] y los Rams consiguieron el suyo".
Más temprano esta semana, al asistente de muchos años de Fisher, Dave McGinnis, ahora un analista de radio para los Titans, se le preguntó sobre los Rams por el diario The Tennessean y dijo: "Primero que nada, Jeff Fisher y yo montamos ese roster; ¿sabes a lo que me refiero?"
McGinnis, que fue asistente del entrenador con los Rams bajo Fisher de 2012 a 2016, dijo que la defensiva y los equipos especiales de los Rams "han estado listos para los playoffs por dos años" y que solo era la ofensiva la que necesitaba un ajuste. McGinnis le dio crédito a McVay por traer "un sistema tremendamente ofensivo", pero también le dio crédito a Fisher -- y nunca mencionó al gerente general por los últimos seis años Les Snead -- por seleccionar al running back Todd Gurley II en el draft.
"Era cuestión de que eramos el equipo más joven de la liga por cuatro años consecutivos", dijo McGinnis. "Este equipo a crecido junto. Este es uno de los mejors equipos en la liga en estos momentos en términos de personal y la manera en la que está jugando".
Con todos saludables, 12 de los 22 jugadores titulares fueron traídos al equipo mientras Fisher era entrenador en jefe en adición al pateador (Greg Zuerlein), el pateador de despeje (Johnny Hekker) y el especialista en devoluciones (Pharoh Cooper), quienes todos fueron seleccionados para el Pro Bowl.
Los equipos especiales han sido una fortaleza consistenta bajo el coordinador John Fassel, y la defensa demostró momentos de ser dominante bajo el ex coordinador defensivo Gregg Williams. Pero la ofensiva, de arriba hasta abajo, era un desastre en la línea ofensiva, los receptores, el quarterback y hasta el running back, como quedó demostrado la temporada pasada.
Fisher fue entrenador de los Titans de 1995 hasta el 2010, comenzando desde los tiempos que eran los Houston Oilers. Los llevó a la postemporada en seis ocasiones, de 1999 hasta el 2008, incluyendo una aparición en el Super Bowl, el cual perdieron por poco margen ante los Rams. Pero han pasado nueve años desde que Fisher, de 59 años, ha sido entrenador de un equipo que terminó con una marca ganadora.
Fisher, que heredó una franquicia de los Rams que había perdido 65 de sus últimos 80 partidos en cinco temporadas, defendió su récord.
"Mi perspectiva es distinta porque yo pasé por eso y se exactamente lo que ocurrió", dijo. "Me divierto con las personas que dicen 'ah, acabas de empatar la marca de Dan Reeves por la mayor cantidad de derrotas en la historia de la NFL'. Bueno, me faltan un par de victorias para estar entre los primero 10. Así, ¿qué es lo que vamos a enfatizar? ¿cuál es tu punto? Dos franquciias, cinco ciudades distintas, seis estadios distintos. No es algo fácil para lograr.
"Los Chargers se mudaron de San Diego a Orange County y comenzaron 0-4. El mudarse es algo grando. No estoy dando excusas, pero el año pasado nos mudamos de St. Louis a Oxnard, de Oxnard a UC Irvine, de UC Irvine a Thousand Oaks. Y esa fue nuestra temporada muerta".