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Atlanta mantendrá precios bajos en estadio para el Super Bowl

FLOWERY BRANCH -- Los aficionados que vayan a ver a Los Angeles Rams enfrentar a los New England Patriots en el Super Bowl LIII pagarán miles de dólares por boletos para el partido, pero al menos pagarán sólo 2 dólares por hot dogs y unos 5 dólares por cervezas dentro del Mercedes-Benz Stadium de Atlanta.

El presidente y CEO de los Atlanta Falcons, Rich McKay, reiteró que el estadio mantendría sus precios de menú accesibles para los aficionados para los 75,000 espectadores que se espera asistan al Super Bowl el 3 de febrero. Al igual que en los partidos de los Falcons en el Mercedes-Benz Stadium, las concesiones tendrán 12 productos populares de alimentos y bebidas --incluyendo hamburguesas con queso de 5 dólares, nachos con queso de 3 dólares y refrescos rellenables de 2 dólares-- a precios más bajos que en cualquier otro recinto deportivo profesional de los Estados Unidos.

Si echamos una mirada al Super Bowl del año pasado en el U.S. Bank Stadium en Minneapolis vemos que un hot dog es 4 dólares más barato en el Mercedes-Benz Stadium, y la cerveza es 1.10 dólares más barata por 20 onzas.

Aumentar los precios con base en la magnitud del Super Bowl nunca fue una opción, indicó McKay.

"Dijimos esto en nuestras negociaciones con la SEC, el Juego por el Campeonato colegial, el Super Bowl y el Final Four... lo que dijimos básicamente es que cada cliente que entra por esa puerta es nuestro cliente", refirió McKay en una entrevista telefónica. "Así que queremos tratar a todos esos clientes por igual y darles la misma experiencia en alimentos y bebidas.

"Lo que fue interesante con las negociaciones con la SEC, el comisionado Michael Slive me decía, 'Oye, quiero una cláusula en este contrato que hable de los precios y te prohíba poder elevar los precios para nuestro partido'. Y le respondí, 'Comisionado, queremos la misma cláusula'. Fue interesante que tuviéramos un objetivo común y dos mentalidades distintas. Así que pusimos eso en todas las ofertas para todos los eventos importantes, incluyendo la Copa Mundial".

Los oficiales presentaron los precios de menú accesibles para el público cuando el Mercedes-Benz Stadium de 1,500 millones de dólares abrió sus puertas en agosto del 2017. Fue una propuesta presentada por el multimillonario dueño de los Falcons, Arthur Blank, la que dio como resultado un éxito inmediato a los ojos de los ejecutivos del estadio. McKay dijo que respecto al último año del Georgia Dome al primer año en el Mercedes-Benz Stadium, el gasto por cliente ascendió 16 por ciento a pesar del 55 por ciento de reducción en los precios.

Se realizó una reunión hace dos semanas con la concesionaria Levy para hacer los preparativos finales para el Super Bowl. Un cambio de último minuto fue incluir otro refrigerador. Hay 12 refrigeradores para comida y 29 para almacenar barriles de cerveza, Los aficionados tendrán más tiempo para gastar, así que el estadio no puede permitirse quedarse sin productos. Para ilustrarlo, el estadio tendrá 75,000 botellas de agua y 55,000 hot dogs almacenados para el Super Bowl.

"Tradicionalmente, abrimos la puerta dos horas antes, pero para este juego, abriremos cuatro horas antes", sentenció McKay. "Así que no hay duda, desde el punto de vista de la comida con hot dogs, pollo, cualquier cosa, vamos a estar bien surtidos, porque sabemos que vamos a enfrentar un evento de gran volumen".

En cuanto a cualquier congestión en los puestos de venta, McKay confía que los 680 puntos de venta que incluyen al menos uno de los elementos de su menú aliviará cualquier problema.

"No te conviene cobrar 2 dólares por un hot dog si te toma una hora conseguirlo", refirió McKay.

McKay tenía la esperanza que otras franquicias introducirían un modelo de menor precio y lo han hecho lentamente. Trece equipos profesionales y colegiales siguieron el ejemplo de los Falcons y el Mercedes-Benz Stadium anunciando un descenso en los precios de sus concesiones, incluyendo los Atlanta Hawks, Baltimore Ravens y Detroit Lions.

"El [equipo] de la NFL que realmente adoptó un programa similar al nuestro son los Baltimore Ravens", sentenció McKay. "Y lo que nos gusta es que al final del año, en la clasificación de los aficionados, terminamos en el N° 1 en todas las categorías de alimentos y bebidas. Y por lo que entiendo, los Ravens ahora son el N° 2 en muchas de esas categorías.

"Lo que me gusta [del Super Bowl] es que nos da la oportunidad de contar la historia a nivel nacional. Todavía tenemos personas que vienen a nuestro estadio para su primer evento y están sorprendidos. Vamos a tener muchos aficionados que vienen de distintas partes del país, ya sea que se trate de aficionados de los dos equipos o simplemente aficionados que vienen al Super Bowl. Nos gusta el hecho que N° 1, van a tener una gran experiencia, y N° 2, van a llevar su historia de vuelta y seguirán promoviéndola".

Más franquicias de la NFL parecen dispuestas a seguir el ejemplo de los Falcons y el Mercedes-Benz Stadium.

"Todos tienen que estudiar lo que hicieron los Falcons", declaró a ESPN el CEO y vicepresidente ejecutivo de los Rams, Kevin Demoff. "Creo que va más allá de simplemente recortar los precios. Es cómo lograron incrementar el volumen, aumentar el servicio. Sus aficionados respondieron. Hay que hacer la tarea no sólo de los precios sino la calidad y velocidad del servicio y las filas.

"Es un gran reconocimiento para la organización y todo lo que hicieron alrededor del programa de concesiones, la hospitalidad, la experiencia en el día de juego. La parte de la concesión es importante. Y sin duda, el elemento principal son los precios. Pero nadie hablaría de los precios si la comida no fuera buena y el servicio no fuera bueno".