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Y Luis Enrique acaba enfrentando a la prensa

PARÍS -- La relación de Luis Enrique con los medios de comunicación que siguen la actualidad del Barcelona nunca ha sido fácil.

Al contrario, se divide entre fría y tirante, pero este martes alcanzó el clímax, cuando tras la humillación sufrida por su equipo en París perdió los papeles en una entrevista individual con TV-3 y ya en la rueda de prensa general volvió a contestar de malas maneras a casi todas las cuestiones que se le presentaron.

“No veis muy bien el partido porque tras el descanso hemos cambiado el posicionamiento; hemos pasado de un 4-3-3 a un 4-2-3-1 intentando fijar a sus jugadores y tener a Leo con más libertad. Podíamos haber hecho el pino y habría pasado lo mismo”, fue su primera contestación, altiva y desafiante cuando Jordi Grau, periodista del canal de televisión de Cataluña le inquirió por la mala imagen de la segunda mitad.

Pero no acabó ahí la cosa.

“Si hay que buscar un responsable soy yo, no le busquéis más cositas ni os preocupéis de eso. Acepto toda la responsabilidad, eh, pero también cuando se gana aceptaría el mismo trato”, continuó con un mal talante evidente.

“Y el mismo trato personal en las entrevistas, que este mismo tono negativo que tienes conmigo me gustaría que se mantuviera también en las entrevistas que me haces cuando ganamos los partidos, ¿vale?”. Y se marchó, o lo parecía, hacia la rueda de prensa.

“Parece muy enfadado, pero no comprendemos a qué se refiere cuando habla de nuestro trato porque en la victoria, casi siempre, y en la derrota siempre hemos mantenido el mismo trato con él”, se despidió de la conexión Jordi Grau.

Y de acuerdo con los de Susana Guasca, de 'Atresmedia', Diario Sport y AsTV, Luis Enrique, al escuchar esta afirmación del periodista catalán se dio la vuelta para volver hacia él, sin saberse a ciencia cierta sus intenciones, pero sujetado por dos colaboradores próximos acabó marchándose hacia la sala de prensa del estadio.

Una vez allí, en la sala de prensa del Parque de los Príncipes y ante todos los periodistas, el discurso del entrenador del Barcelona mantuvo el tono despectivo y poco comunicador.

Con un discurso cerrado y sin apenas dar cuenta de ningún error de concepto de su equipo más allá de elogiar al rival, Luis Enrique cerró su rueda de prensa respondiendo a ESPN.

- ¿Se puede explicar todo a través de la ilusión, ambición e intensidad que le ha puesto el PSG y que no se ha visto en el Barcelona?

"Ya he explicado lo que pienso, podéis ponerle los adjetivos que queráis, pero ya he dicho lo que creo”, solventó con una evidente mala cara.

Se levantó y se fue. Y sumó un capítulo más a su difícil, cada vez más, relación con los medios de comunicación.