BARCELONA -- Luis Rubiales, presidente de la Real Federación Española de Futbol, atraviesa su momento más crítico en el cargo a raíz de la polémica generada por el beso robado con que sorprendió a la futbolista Jenni Hermoso en Sydney y, también, por su reacción en el palco de autoridades, y a aunque desde el ente federativo se aseguró a ESPN que no se plantea una renuncia, su permanencia se sospecha más improbable a cada hora que pasa.
Las declaraciones, este miércoles, del presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD) Víctor Francos suponen un nuevo empujón en contra del propio Rubiales al convenir que el testimonio de Jenni Hermoso "sería muy importante"... pero avisar que "el futbol español necesita un nuevo rumbo".
A sus palabras se unieron las de Miquel Iceta, ministro de Cultura y Deporte del Gobierno en funciones, y que trasladó a la agencia EFE la necesidad "de tomar decisiones... Y si no las toma la Federación lo hará el CSD", advirtiendo que dependiendo de lo que pueda suceder en la Asamblea convocada el viernes por la federación, desde el Consejo Superior de Deportes "se activarán todos los mecanismos a partir de denuncias ya presentadas, probablemente al comienzo de la próxima semana".
El video de disculpa que grabó el mandatario durante la escala técnica de la expedición española en Doha (y en el que no quiso tomar parte la jugadora a pesar de las presiones recibidas) no sirvió para apagar un escándalo que, al contrario, ha ido subiendo de intensidad. Irene Montero, ministra de Igualdad en funciones del gobierno español, calificó como "violencia sexual" lo sucedido y mientras el presidente Pedro Sánchez, que mantuvo una actitud muy fría con Rubiales durante la recepción a las campeonas, consideró sus disculpas "del todo insuficientes e inadecuadas", diferentes partidos políticos se han apresurado a solicitar, en algunos casos exigir, su renuncia inmediata.
De hecho, Yolanda Díaz, vicepresidenta del Gobierno en funciones de España, fue mucho más contundente que el mismo presidente y pidió que "se activen todos los protocolos" contra Rubiales para acelerar su salida inmediata del cargo por entender que "se ha vejado y agredido" a una mujer.
LA TORMENTA DEFINITIVA
En vista del alcance de la polémica la propia federación convocó el martes por la tarde una Asamblea Extraordinaria para el viernes para tratar el asunto, conociéndose que dicha reunión se anunció motivada por las federaciones territoriales, que mantienen, de momento, su apoyo al presidente.
El favor que mantiene aún Rubiales por parte de las federaciones territoriales se transforma en silencio por parte de la mayoría de clubes. Por ahora solamente el Getafe, por boca de su propio presidente Ángel Torres, se ha posicionado claramente en contra el mandatario exigiendo su renuncia "porque no se puede tolerar este comportamiento del presidente de la federación". Según Torres, Rubiales "no puede seguir un minuto más en el cargo y el CSD debe actuar sin esperar a la Asamblea del viernes".
El madrileño es uno de los once clubes miembros de la Asamblea y único que ha dado un paso al frente. Desde el Barcelona, también miembro, una fuente oficial avanzó que se esperará a que "el señor Rubiales ofrezca las explicaciones oportunas en la reunión del viernes antes de pronunciarse", si bien internamente se considera que su forma de proceder fue "impropia".
A pesar de la discreción que mantienen los clubs y del silencio de las propias futbolistas de la selección, que han preferido esperar a ver el desenlace para no quedar en el foco en un momento que solo debería ser de celebración, alrededor de Luis Rubiales crece la presión.
"Sufrí humillaciones y palabras que no puedo repetir. Llegó a decirme, delante de todos, con la sorna que tiene de reírse, 'venga, ve, que has venido a ponerte las rodilleras'" relató Tamara Ramos este miércoles en un programa de televisión, recordando su etapa como directora de marketing de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) cuando Rubiales presidía el sindicato.
El cerco se va estrechando de tal manera alrededor del todavía presidente de la Federación que al escándalo se suma una nueva circunstancia. Y es que la jueza Delia Rodrigo, titular del juzgado de Majadahonda (Madrid) y que investiga las presuntas irregularidades en la concesión de la Supercopa de España a Arabia Saudita, a través de un acuerdo entre Rubiales y Gerard Piqué, ha solicitado información sobre un viaje que el propio Rubiales hizo a Nueva York, acompañado de una pintora mexicana, con fondos del organismo simulando reuniones con la MLS y las Naciones Unidas de las que no hay constancia.