MADRID -- El Real Madrid sigue colocando a sus jóvenes por Europa mientras espera la sanción de la FIFA por irregularidades en la inscripción de menores. El siguiente en salir será Martin Odegaard, quien se enfila hacia el Stade de Rennes francés.
El mediocampista noruego irá al club de la Primera División francesa en calidad de cedido y sin opción a compra, operación que podría hacerse oficial en las próximas horas, luego de que el técnico del equipo galo, Chirstiano Gourcuff, admitiera que su club está negociando con el club merengue por el jugador.
"Las circunstancias han hecho posible que podamos conseguir a un jugador de gran nivel que en condiciones normales sería inaccesible. Las tres partes estamos interesadas; Real Madrid busca la evolución del jugador, él no quiere acabar en un equipo cualquiera. Es una oportunidad que nosotros debemos aprovechar", dijo el técnico del conjunto francés en declaraciones que recoge el diario L’Equipe este martes.
Hacía meses que el Real Madrid buscaba acomodo para el jugador de 17 años, quien llegó a la casa blanca en enero de 2015 -apenas con 16 años de edad cumplidos- procedente del Stromsgodset a cambio de unos 2.5 millones de euros, según reportó la prensa noruega.
Odegaard, que llamó la atención en su campaña de estreno, acababa de realizar una pequeña gira por los campamentos de los grandes de Europa (incluso llegó a probarse con el Ajax), convirtiendo su fichaje en una carrera por asegurarse el futuro.
Se le ofreció un contrato sin precedentes en la casa blanca para un chico de su edad; entrenar con el primer equipo y bajar al Castilla únicamente para disputar partidos en su primera temporada.
Pero el noruego ni se adaptó completamente al filial -nunca logró hacerse indispensable para Zidane, entonces, o Ramis después- ni llamó especialmente la atención de los tres técnicos que han pasado por el banquillo merengue desde entonces, desde Ancelotti hasta el francés.
En dos temporadas con el filial en la Segunda División B, el noruego apenas aportó dos tantos y ocho asistencias en 3 mil 205 minutos repartidos entre 45 partidos. Un saldo muy pobre para el jugador llamado a ser la estrella del futuro.
Y es precisamente ese status el que obliga al Real Madrid a buscar la manera de impulsar su crecimiento. En la directiva consideran que su permanencia en el filial una temporada más en lugar de ayudar, implicará un retroceso en su carrera -mismo caso que Mariano, máximo goleador del filial en la campaña anterior- razón por la que apenas concluyó la temporada, se quedó sin ficha del Castilla.
La salida de Odegaard y el resto de jugadores del Castilla que ya habían cumplido ciclo como juveniles ha sido una de las prioridades merengues desde que inició el verano.
Hasta el momento, diez jugadores han abandonado la institución, y se espera que tras Odegaard, Mariano sea cedido a otro equipo de Primera. Doce jugadores en total. Todo ello contra el reloj, pues en el momento que caiga la sanción, así sea a partir del próximo mercado (invierno de 2017), el Real Madrid se verá obligado a negociar cesiones más largas ya que no podrá recuperar jugadores cedidos posteriormente antes de 2018.
De los jugadores que se han marchado, sólo dos lo han hecho definitivamente. Denis Cheryshev, traspasado a Villarreal por siete millones de euros, y Álvaro Arbeloa, quien terminó contrato. El resto, ya sea a modo de cesión o traspaso, son jugadores recuperables para el club.
El resto han sido enviados a prepararse para el primer equipo a modo de cesión en equipos de menor rango donde tienen asegurado tiempo de juego. Marcos Llorente al Alavés, Burgui al Sporting, Jesús Vallejo al Eintracht, Diego Llorente al Málaga y Borja Mayoral al Wofsburgo.