<
>

Valverde se despoja del triunfalismo ante la Final de Copa del Rey

BARCELONA -- Ernesto Valverde está muy cercano a conquistar su primer título de Liga en España. No lo hizo ni como jugador ni como entrenador hasta llegar al Barcelona... Al frente del cual puede este sábado lograr también la Copa del Rey. La primera en el fútbol español desde el banquillo.

Su pensamiento, sin embargo, se mantuvo en la cautela este viernes. “Nunca puedes pensar que tienes nada ganado de antemano. No puedes plantearte ganar la final, una eliminatoria, la Liga... Antes de tiempo y la final de mañana está para ganar, no ganada”, proclamó Valverde este viernes, mostrándose firme en evitar ningún tipo de favoritismo.

El último reto del técnico azulgrana conduce a repasar una carrera repleta de éxitos en Grecia al frente del Olympiacos pero que en España se limitó a la conquista de la Supercopa, como entrenador del Athletic de Bilbao y venciendo al Barcelona de Luis Enrique. “Aquella fue una victoria extraordinaria”, convino, avisando que el Sevilla “es un rival con argumentos suficientes para ganar esta final”.

Al cabo de 518 partidos divididos entre Athletic, Espanyol, Villarreal, Valencia y Barça, Valverde se enfrenta a su último desafío, por segunda vez y después de haber sufrido la derrota en la precedente, precisamente ante el equipo que ahora dirige. “La de mañana es una oportunidad que hay que aprovechar porque solo uno de los dos equipos será campeón y hay que saber que podemos perder” aseveró.

“Nos cuelgan el papel de favoritos cuando aún no hemos ganado nada”, repitió Valverde, admitiendo que en el Barça “ganar es siempre una obligación porque es un equipo grande” y, a la vez, intentando apartar del plano la decepción de Roma.

Así, cuestionado acerca de un cambio en la presentación del partido respecto a Roma, o al último partido en el Pizjuán, el entrenador azulgrana se revolvió incómodo aseverando que en aquellos partidos “el rival estuvo mejor... Pero no es cierto que no saliéramos a ganar el partido. Nosotros siempre queremos hacer lo mismo”, sentenció firme.

Bromista ante una pregunta respecto a una pubalgia que pudiera padecer Lionel Messi según se especula en Argentina (“nunca había visto que existiera un diagnóstico a tantos kilómetros de distancia”), Valverde mostró su confianza en Cillessen y enfatizó las ganas de ganar que existen en el vestuario.

“Es una final, el último paso para lograr un título y no creo que haya relajación en nadie. Que los jugadores tengan varios títulos de este calibre no significa que no le den importancia a este partido”, sentenció.

“Cuando llega el momento decisivo de la temporada es cuando se recogen los frutos. Muchos se han quedado por el camino y nosotros estamos ahora aquí con la posibilidad de ganar”, concluyó un Valverde alejado de cualquier euforia que pudiera existir alrededor del equipo pero confiado plenamente en los suyos.