El mundo está enamorado. Deslizándose por la cancha, conectando el juego y haciendo pases perfectos hacia adelante, Gonzalo Higuaín no sólo marcó dos goles para superar a AC Milan, sino que su actuación fue tan sobresaliente que los analistas no pueden dejar de hablar de ella.
El DT de Milan, Vincenzo Montella, dijo en broma que no todos los equipos pueden tener un Higuaín cuando le pidieron que analizara la derrota de su equipo. En su nota de análisis del partido entre Milan y Juventus, Calciomercato se preguntaba por qué Milan consideró apropiado gastar dinero en mediocridad en lugar de invertir una suma importante en talento de primera clase como Higuaín, y un periódico describió el rendimiento del delantero como el mejor que ha visto con la camiseta bianconera.
Lo de Higuaín fue glorioso. Jugó a la altura de un delantero de €90 millones, con goles y creación de juego, y se movió por la cancha con inteligencia, lo cual plantea la siguiente pregunta: ¿Por qué Juventus tuvo que esperar hasta ahora para tener este tipo de rendimiento? ¿Por qué un jugador evidentemente capaz de tanto tardó todo este tiempo en producir actuaciones no sólo dignas de €90m, sino de los aplausos de muchos de su críticos más feroces?
Massimiliano Allegri quizás haya tenido dificultades para sacar lo mejor de Higuaín, pero fue con seriedad que lo dejó en el banco de suplentes en el Derby della Mole. Quería más. El argentino tiene muchísimo talento y deslumbró tanto en Real Madrid como en Napoli. Si bien Higuaín ha producido para Juventus, esta campaña había sido decepcionante.
No estuvo en óptimas condiciones físicas y se lo vio especialmente lento en sus reacciones, frustrado y desequilibrado durante la primera parte de la campaña. Hay que reconocer que siempre lo intenta y se las arregló para convertir y jugar bien, pero muchos de nosotros, este blog inclusive, comenzamos a preguntarnos si era capaz de más, y si podía hacer más.
Evidentemente puede, y según Corriere dello Sport, el jugador buscó reaccionar a las diversas exclusiones en su club y su selección nacional con su mejor nivel. Eso significó entrenar más y cambiar su dieta, y sacar el máximo provecho de la pausa internacional para entrenar con intensidad y perder un poco de peso.
En los últimos partidos hemos visto a un Higuaín más decidido, trabajador y dispuesto a sacrificarse por su equipo. Pero contra el equipo rossonero, estuvo espectacular.
Hay que darle crédito a Allegri por haber manejado tan bien a su jugador, asegurándose de que Higuaín mantuviera la confianza en los momentos difíciles, pero exigiéndole aún más tras su actuación contra Milan. Higuaín es conocido por dormirse en los laureles cuando está jugando bien, de modo que en su conferencia de prensa posterior al partido Allegri no sólo le pidió que mantenga su nivel, sino que lo mejore.
Con Allegri siempre llega un punto en el que sus equipos empiezan a hacer clic. Juventus todavía no está ahí, pero sólo porque aún está trabajando para encontrar el plan de juego perfecto para ensalzar las virtudes de todos sus nuevos jugadores, aunque el triunfo en Milán fue tan suyo como de Higuaín.
Allegri realmente preparó a sus hombres para este partido, tanto mental como tácticamente. Tras detectar la gran dependencia de Milan en la creatividad de Suso, Allegri neutralizó sus puntos fuertes pidiéndoles a Mario Mandzukic y Kwadwo Asamoah que se sacrificaran por la causa. Sami Khedira bajó sin problemas al espacio vacío para bloquear a Milan, mientras que Juan Cuadrado, Paulo Dybala y, por supuesto, Higuaín, hicieron su magia adelante. El colombiano Juan Cuadrado prestó especial atención a sus funciones defensivas.
Juventus jugó como una unidad profesional, defendió en equipo para mantener su arco en cero, y trabajó con la madurez necesaria para manejar cada momento del partido, sufriendo cuando era necesario. Debe seguir jugando así hasta que Allegri incorpore a los nuevos fichajes, quienes se están desarrollando bien para crear un conjunto más emprendedor, pero equilibrado.
Juventus viene bien en la Serie A, y ha llegado la hora de prestarle atención a Sporting CP en la Champions League. Si caen ante el equipo portugués no podrán avanzar a la siguiente ronda del torneo, de modo que apuntarán a entregar un sólido desempeño. La Vieja Señora ya conoce los puntos fuertes de su rival.
Sporting tiene una buena defensa y tendrá el impulso necesario para presionar en ataque jugando de local frente a su público, sobre todo considerando la fragilidad de la defensa de Juventus. Como tal, es clave que el equipo italiano trabaje en conjunto, como lo hizo contra Milan, y que jugadores como Khedira tapen los huecos y bloqueen los espacios para complicarles la vida a los delanteros contrarios; sobre todo a Gelson Martins, quien sabe cómo generar problemas.
Si bien no hay dificultades para elegir el equipo, Allegri debe resolver el problema del lateral derecho. Mattia De Sciglio ha sido convocado, pero aún está por verse si está listo para jugar de titular. De no ser así, Allegri le pedirá a Stefano que redescubra su nueva posición como lateral derecho, o le pedirá a Cuadrado que juegue como defensor. Si se decide por esta última alternativa, entonces es probable que Federico Bernardeschi o Douglas Costa jueguen delante de él, aunque podrían pedirle a Mandzukic que juegue por la derecha para ofrecerle apoyo defensivo a Cuadrado.
Allegri insistió sobre la necesidad de la presencia de Mandzukic en partidos como éstos, un jugador que encarna el espíritu de sacrificio y un auténtico profesional, ya que inspira una mentalidad luchadora y siempre es generoso en su juego. Van a necesitar de su experiencia. Si bien la defensa debe ser sólida --sobre todo en una prueba tan importante-- Dybala e Higuaín deben convertir los goles que Juventus necesita para garantizar la progresión en este certamen.
Mina Rzouki cubre Juventus y la selección nacional de Italia para ESPN FC. Síguela en Twitter: @Minarzouki.