MÉXICO -- Una bandera grande sobresalía por encima de las demás que había en el estacionamiento del Estadio Olímpico Universitario. Era una que tenía la imagen de Hugo Sánchez, acompañado de una leyenda: "Puma, mexicano, excepcional" y era sostenida por José Antonio Maravilla y su hijo Héctor Valencia, ambos añoran que el estratega que los llevó al bicampeonato en el 2004 vuelva al banquillo felino. El padre aseguró a ESPN Digital que tuvo una relación con el pentapichi desde los 12 años de edad, cuando fueron compañeros en la secundaria.
"Lo conozco desde la secundaria, conozco a su mamá y a todos ellos", sostuvo el señor José Antonio, también conocido como 'Hugo Maravilla' quien recuerda que Sánchez dentro del salón de clases era muy aplicado y serio, pero afuera ya mostraba dotes de que sería un gran futbolista.
Hugo, apoyo a los hijos del señor José para que pudieran ingresar a las fuerzas básicas de los Pumas. Héctor Valencia, estuvo en las inferiores de los Universitarios, no tuvo suerte para trascender como futbolista y ahora pide el regreso de quien alguna vez lo recomendó para formar parte de la cantera: "Es de lo que pido mi limosna siempre. Yo digo que para Pumas no hay otro entrenador más que Hugo Sánchez. Él les decía mucho que tuvieran amígdalas, les hace falta más fuerza, más empeño a estos chavos".
El padre, José Antonio Maravilla, también espera que Hugo pronto pueda volver a dirigir al equipo de sus amores: "Lo esperamos, de hecho antes de que llegara Palencia, pensamos que iba a regresar a Pumas".
Ambos fueron la sensación en el estacionamiento, varios aficionados se acercaban para tomarle foto a la bandera, misma que tiene los autógrafos de aquel plantel que fue bicampeón al mando de Hugo Sánchez en el 2004.