Habló, como pudo y como lo dejan. Rodrygo, el delantero brasileño de Real Madrid, contó por qué no puede hablar de la discusión que tuvo con Lionel Messi, en los graves incidentes de la semana pasada en el Maracaná de Río de Janeiro, por las Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial de 2026. Ese día, Argentina logró un triunfo memorable sobre Brasil, que lo afirmó en la cima.
Autor del primer gol de Real Madrid en la victoria 4-2 de este miércoles contra Napoli en el Santiago Bernabeú, por la la quinta fecha del Grupo C de la UEFA Champions League, Rodrygo fue claro.
"De Messi no puedo hablar", afirmó. "¿Por qué?", le preguntaron. "Porque el Real Madrid no me deja", dijo entre risas y se fue de la zona mixta, donde los futbolistas atienden a la prensa. Eso ocurrió tras el triunfo del Merengue, que le permiió asegurarse el primer lugar de su grupo en la Champions.
Ocho días antes, en pleno Maracaná lleno, cuando los seleccionados de Argentina y Brasil salieron a la cancha para jugar el gran clásico sudamericano, los jugadores de la Albiceleste, con Messi a la cabeza, fueron a ver qué pasaba en una tribuna cabecera, con hinchas de su país que fueron agredidos por locales y sobre todo por la policía de Río de Janeiro.
El crack argentino les avisó a sus compañeros que dejaban el campo de juego, se volvieron a los vestuarios y volvieron cuando en teoría estaban dadas las condiciones para disputar el encuentro. Al regresar a la cancha, Messi discutió fuerte con Rodrygo, ante los ojos de todos, y se acercó Rodrigo De Paul a hablar.
Este silencio del brasileño se debe a que todos los clubes grandes suelen imponer cláusulas en la firma de los contratos en las cuales los futbolistas se comprometen a no realizar declaraciones que alteren la tranquilidad del plantel, y la línea se la bajan en cada oportunidad los encargados de prensa de cada club.
Al brasileño de 22 años le indicaron que no genere más polémicas. La citada noche en Río, Messi encaró a Rodrygo después de una frase del exSantos y le dijo: "¿Por qué cagones?, si somos campeones del mundo". Después, el padre del brasileño cuestionó a la Pulga por su procedimiento. Sin dudas, al jugador de la Verdeamarelha su club, Real Madrid, le pidió silencio.