Sergio Ramos, capitán de España, ha sido blanco de críticas de propios y extraños desde hace casi un mes, cuando en la final de la Champions League cometió una falta sobre Mohamed Salah en la que el egipcio acabó lesionado y perdiéndose el primer partido del Mundial.
Hace unos días fue Diego Maradona, quien en un programa de televisión argentino criticó al central español y dijo que “no es un crack” como sí lo es el uruguayo Diego Godín.
“Para mí, Maradona es un grande y no voy a valorar las opiniones personales. Yo lo respeto mucho. A mí él sí que me parece un crack pero toda Argentina sabe que está a años luz del mejor jugador de Argentina que es Lionel Messi”, dijo el jugador a las radiodifusoras españolas tras el encuentro en que la selección española venció por 1-0 a Irán.
Pero las críticas no acaban ahí. Este miércoles ha sido el técnico de Irán, Carlos Queiroz, quien en rueda de prensa tras el encuentro en que España venció a su equipo, se dirigió a Dani Carvajal quien se quejó en torno a la actitud de su equipo por “perder tiempo y fingir molestias”.
“Recomiendo a Carvajal poner los ojos en su compañero de equipo que ha tirado a un egipcio de la Copa del Mundo”, había dicho Queiroz.
“Ya hice muy populares a los protagonistas. Perfiero mantenerme al margen”, señaló Sergio Ramos al respecto. No habían pasado cinco minutos, y cuando el jugador aún estaba atendiendo a los medios españoles en la zona mixta del estadio en Kazán, apareció el entrenador portugués. Para abrazarlo.
“Me llevo bien con él. Por eso digo… Agarrarte a alguien que esté un poquito arriba al nivel popular siempre es bueno (para que se hable). Ya me dio un abrazo en el descanso. Es como Maradona, los comentarios que hace no tienen sentido”, dijo Ramos.