NUEVA YORK -- Un exasesor del presidente de la Concacaf se declaró culpable el miércoles de un complot para lavado de dinero, como parte de la pesquisa de las autoridades estadounidense sobre la corrupción en el fútbol mundial.
Costas Takkas, de 60 años y quien trabajó como asesor del expresidente de la Concacaf Jeffrey Webb, se declaró culpable en un tribunal federal en Nueva York, más de un año después de que se le extraditó de Suiza a Estados Unidos. Pasó 10 meses en una cárcel del país europeo tras figurar entre siete dirigentes del fútbol arrestados en mayo de 2015 en un hotel de Zurich.
Aquella redada se realizó dos días antes de la elección presidencial de la FIFA.
Gordon Mehler, abogado de Takkas, dijo frente a la corte que su cliente era el único acusado a quien se había permitido declararse culpable de un sólo cargo, “porque es una figura menor en este caso”.
Takkas, ciudadano británico, también se desempeñó como secretario general de la federación de fútbol de las Islas Caimán.
Fue imputado por solicitar y recibir millones de dólares en sobornos a nombre de Webb, a cambio de los derechos de mercadeo de partidos de las eliminatorias mundialistas. Webb ya se declaró culpable de crimen organizado y aguarda por su sentencia.
En su declaración, Takkas dijo a la jueza Pamela K. Chen que “había evitado reconocer conscientemente que estas compañías daban al señor Webb dinero para influir en sus acciones como dirigente del fútbol”.
Agregó que, por instrucciones de Webb, realizó transferencias electrónicas de dinero a través de bancos en Florida y las Islas Caimán de 2012 a 2015.
Un fiscal dijo que Takkas estaba al tanto de que los parámetros federales contemplan una sentencia de entre 41 y 51 meses de prisión.
Sin embargo, Mehler dijo que pedirá que Takkas, quien está libre bajo fianza, no pase más tiempo preso, particularmente porque su encarcelamiento en Suiza constituyó una detención estricta, que incluyó confinamiento en solitario.
La sentencia se dictaría el 19 de septiembre.