"¿De Madrigal? Sabíamos que era un tío alto y que iba bien de cabeza", ha subrayado el defensa barcelonista, un tanto apesadumbrado por el escaso éxito de su equipo, especialmente en la línea defensiva, pues las imprecisiones y errores condujeron al Barcelona a un estrepitoso fracaso en la Copa.

El jugador ha señalado que no hay espacio para las lamentaciones, debido al compromiso que el Barcelona debe preparar para el partido contra el Athletic el próximo sábado en San Mamés.

"No hay un solo culpable. La derrota fue colectiva, aunque está claro que motivada por errores individuales. Y los pagamos muy caro", ha razonado el jugador.

"Los errores son humanos aunque, si se producen atrás, se convierten en gol, mientras que, si los fallos los provocan los delanteros, no tiene la misma repercusión", ha añadido el jugador, quien ha eludido responsabilidades en los goles, a pesar de reconocer que en el primer tanto del Novelda "pude haber hecho algo más".

Siguiendo con las responsabilidades, Reiziger ha considerado que el técnico, Louis van Gaal, no debe soportar ninguna tras la derrota. "Somos un equipo. No creo que el entrenador tenga más culpa que los jugadores", ha indicado.