"Esta medida provoca un gran daño a las sociedades pequeñas y medianas", manifestó el presidente del Perugia Alessandro Gaucci al diario Tutto Sport.

"Además de aumentar los precios de los jugadores comunitarios, atenta contra la libertad del mercado y los derechos laborales", expresó.

Se declaró convencido que esta decisión se podría impugnar ante cualquier juez y añadió que se debería buscar un compromiso a un límite de los jugadores extracomunitarios, pero no al bloqueo total.

La federación italiana acordó el 4 de marzo el bloqueo total en las series B y C, mientras que dejó abierta la posibilidad a los equipos de la serie de honor de contratar solo a un jugador, pero en sustitución de otro extracomunitario.

Gaucci dijo que la medida representa además la pérdida de grandes ganancias con este tipo de jugadores.

Contó que en 1998 había comprado al mediocampista japonés Hidetoshi Nakata por tres millones de dólares y lo había vendido dos años más tarde al Roma en 50 millones de dólares.

"Hay varias otras operaciones comerciales que nos permitieron financiarnos y que ahora no serán posibles hacerlas", afirmó.

El presidente del Brescia Gino Corioni expresó la misma opinión, club que también ha comprado jugadores extracomunitarios a bajo precio y que después ha vendido por mucho mas.

Dijo que incluso "podía haber comprado a Ronaldo cuando era muy joven, con apenas 600.000 dólares, pero no pudimos porque bajamos a la serie B y el jugador brasileño fue a un equipo holandés en diez millones de dólares y al Inter se lo vendieron en 50".

"Hace dos años, tuve la oportunidad de comprar (al centrocampista brasileño) Kaká, que para mi es el mejor jugador de estos momentos, bastaba un millón y medio de dólares, ahora vale 20", aseguró.

El bloqueo de los jugadores extracomunitarios es "una norma equivocada, pero en el calcio, son pocas las decisiones inteligentes que se toman", expresó.