Y es que, al igual que el Inter, tanto el Juventus Turín como el Milán o el Roma, los otros teóricos grandes candidatos al "scudetto" afrontan a equipos en lucha por la salvación y, además, estos tres últimos juegan en propia casa.

Así, en la noche del sábado, el Roma recibe al Udinese, en un partido que deberá servir para evaluar si en verdad el equipo romano del técnico Fabio Capello ha dejado atrás su tan comentada crisis. Además, le visita un conjunto ubicado en la mitad de la tabla, con un punto más que el propio Roma, pero que no parece estar está temporada "muy fino".

El partido se jugará el sábado para poder disponer del mayor contingente posible de miembros de la fuerzas del orden el domingo, cuando se celebra la santificación de José María Escrivá de Balaguer, con la consiguiente masiva afluencia de personas llegadas a Roma desde todo el mundo. De hecho ya es imposible encontrar una plaza hotelera libre en la ciudad.

En la tarde del sábado se disputará un Reggina-Brescia importante para la lucha por la permanencia en que están inmersos ambos equipos. Ya en domingo, el Inter de Milán del técnico argentino Héctor Cúper viaja a Piacenza, donde debería reforzar su liderato y llevarse tres puntos que le permitan sumar su cuarta victoria liguera y seguir siendo el único equipo a puntuación plena.

Más asequible lo deben tener el Juventus Turín y el Milán, que son visitados por el ascendido Como, penúltimo en la tabla clasificatoria (un solo punto), y el colista Torino (único equipo sin puntos), respectivamente.

Son partidos en los que el juventino Alessandro Del Piero y el milanista Filippo Inzaghi podrían seguir demoliendo la meta rival como hasta ahora están realizado en lo que se lleva de campaña.