El mexicano Mario "Dragoncito" Rodríguez (15-6-4, 11 KO) se convirtió este sábado 1 de septiembre en el nuevo campeón mundial mínimo de la Federación Internacional de Boxeo (FIB) derrotando por nocaut efectivo en el séptimo round al sudafricano Nkosinathi Joyi (22-1, 15 KO) en el Gimnasio Municipal Luis Estrada Medina de la ciudad de Guasave, Sinaloa, México.

Fue un triunfo histórico para Rodríguez, de sólo 23 años de edad, que en su segundo intento alcanzó la cima del boxeo profesional apoderándose del cinturón de las 105 libras ante el delirio de su publico en su ciudad natal en una función denominada "Operación Dragón", el 14 de agosto del 2010. El Dragoncito cayó por puntos ante el campeón mundial paja de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) en esta misma ciudad en lo que fue su primera oportunidad titular.

La pelea la dominó el hasta este sábado campeón mundial Joyi en base a un mejor boxeo desde su guardia zurda, pero el diminuto peleador guasavense fue perseverante encimando al sudafricano y conectando golpes muy potentes aunque en menor cantidad que Joyi, pero a la larga le dio resultado para coronarse.

En el séptimo asalto, el mexicano se llevó por delante al campeón defensor en base a fortaleza y empuje conectando golpes al cuerpo y al rostro de Joyi, que empezó a retroceder al recibir un gancho a la zona apática (al cuerpo) que lo obligó a refugiarse en las cuerdas, lo que aprovechó Rodríguez para encimarse y le conectó un uppercut seguido de un gancho curvo, depositando en el enlonado a su rival para la cuenta de diez.

El resultado enloqueció a los asistentes porque a Rodríguez la mayoría de los entendidos en el boxeo le daban muy poca oportunidad de éxito ante un peleador como Joyi que lo superaba en experiencia, en boxeo, pero no en determinación y perseverancia.

El cetro, de hecho, regresó a México, dado que Joyi se lo había arrebatado al también azteca Raúl "Rayito" García, y Mario "Dragoncito" Rodríguez no solo le quitó el título, sino también su condición de invicto.