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Cuenta regresiva hacia Tokio 2020: Mirco Cuello, de Santa Fe para el mundo

El santafesino Mirco Cuello, representante argentino en la categoría de los 57 kilos en los Juegos Olímpicos Tokio 2020, cuenta que a él le gustaba también el fútbol, pero que cuando empezó con el boxeo, a los 13 años, comprendió que era lo suyo. “Me quería destacar y con el boxeo no solamente me identificaba más, era yo solo, sin un equipo, solamente yo”, recuerda.

Cuello ya lleva 4 peleas como rentado, todas ganadas antes del límite. Su primer combate profesional fue el 7 de noviembre de 2020 en Rock Hill, Estados Unidos, cuando le ganó a Akihiro Nakamura, por nocaut en el 1º asalto.

Fue una izquierda cruzada a la altura de la sien, y con ello se terminó todo, porque el hombre cayó y no se levantó. “Sin embargo no disfruté tanto de la pelea en sí como de todo lo que rodea al boxeo allá; en los Estados Unidos es otra cosa, sin desmerecer lo nuestro, que se entienda bien”, expresa. Su debut en los Estados Unidos, bajo la tutela de Payne Boxing Series fue breve y efectiva, puesto que su rival duró solamente 53 segundos.

Mirco es de Arroyo Seco, provincia de Santa Fe, la misma de Carlos Monzón, Miguel Angel Cuello, Juan Martín Coggi o Marcos René Maidana, el “Chino”. “Yo nací en Villa Constitución el 21 de septiembre de 2000, me anotaron ahí, pero yo soy de Arroyo Seco, así nomás, es mi tierra”, señala el joven.

Ganó la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de la Juventud realizados en Buenos Aires en 2018. Y este año viene de lograr una medalla de plata en la competencia internacional de Estambul, Turquía, en donde tuvo que ganar cuatro peleas. Ha peleado en Budapest, Brandemburgo, Sofía o Managua, para dar cuenta de su experiencia

Como aficionado realizó 112 peleas y siente que entre los rivales a vencer está el cubano Lázaro Alvarez.

Hincha de Rosario Central y admirador de Vasily Lomachenko y de Naoya Inoue, empezó a practicar el boxeo gracias a su padre, Darío, que fue su primer entrenador. “Fue en mi casa, o sea que todo quedó en familia desde el primer día”, dice.

Hizo su primera exhibición cuando andaba por los ocho años, y no hay que olvidar que su hermana, Eliana, también boxea, con una marca de 3-2-0.

Siente que el trabajo con Ruperto “Peto” Ruiz, preparador físico, es muy bueno y se siente cómodo con todos los entrenamientos que han realizado en el Cenard, incluyendo claro, la escuela de combate de los sábados.

Junto a Fabricio Nieva y Mariano Carrera, se ha estado trabajando mucho y muy bien para emprender la aventura Tokio 2020. “No vamos a ir justamente a pasear. Sabemos que no va a ser fácil, pero estamos todos confiados en que tenemos nuestra experiencia y que hemos trabajado muy bien”, afirma este zurdo santafecino. Y a no olvidar que viene de tierra de campeones.

Su debut profesional fue un 7 de noviembre, justamente la fecha en que Carlos Monzón destronó a Nino Benvenuti. Tal vez sea algo más que una coincidencia...