Increíblemente, el césped parece haberse convertido en una especie de kriptonita para Kei Nishikori. Es que de 2015 a esta parte, el japonés se retiró lesionado de los cinco torneos que jugó sobre esa superficie...
Pero la maldición nace siempre en el mismo terreno: el ATP de Halle, de donde este jueves se volvió a ir con molestias físicas, cuando apenas habían transcurrido cinco games de su duelo ante Karen Khachanov.
Dos años atrás, el karma de Halle para Nishikori comenzó con un problema muscular que lo bajó de la semifinal ante Andreas Seppi en el primer set.
15 días después, la lesión seguía dejando secuelas y el japonés abandonaba en segunda rueda de Wimbledon. "Es lo mismo que tuve en Alemania -confirmaba el jugador-. Me molesta hasta para caminar".
En 2016, recorrido similar: molestias en la zona costal y no presentación al segundo partido de Halle. De regreso en Wimbledon, retiro en cuarta ronda frente a Marin Cilic.
"Otra vez, misma lesión que en Halle. Es muy frustrante, porque encima en todo el año no había tenido un solo problema. Solo estas semanas", protestaba el asiático.
12 meses más tarde, increíblemente se repite la historia en Alemania. Esta vez, un dolor en la cintura, también en segunda rueda. ¿Se volverá a estirar la maldición en Wimbledon?