LOS DOS AL ATAQUE
En el arranque los dos equipos se preocuparon más por convertir que por defender. Islas Vírgenes trataba de imponerle velocidad al juego mientras que Venezuela intentaba aprovechar a sus hombres grandes cerca de los tableros. Los caribeños tomaron una pequeña ventaja y la mantuvieron hasta finalizar el primer cuarto: 28-25.

En los segundos diez minutos comenzó a tomar ventajas el conjunto de Jim Calvin porque apareció la puntería de David Díaz desde media distancia (5/9 dobles y 5 rebotes).

Los hombres de Tevester Anderson perdieron efectividad y ya no alcanzaba con el aporte de Calvert White (2/5 triples y 2/4 dobles).

Así fue que llegaron al descanso con 11 puntos de diferencia para los sudamericanos: 56-45.

LOS CARIBEÑOS LEVANTARON EN EL TERCERO
En el tercer cuarto se vió lo mejor de Venezuela y lo peor de Islas Vírgenes. Al dominio de Richard Lugo (8/12 dobles y 7 rebotes) y Carl Herrera (8/12 dobles y 6 rebotes) en la zona pintada, se sumó el trabajo de Oscar Torres (3/7 dobles y 11 rebotes).

Los centroamericanos se quedaron sin gol y además cometieron varios errores que se tradujeron en pérdidas. El 76-55 que mostraba el tanteador antes de ir al último descanso hacía preveer que el partido estaba definido.

En el último parcial Calvin le dio descanso a sus principales hombres y comenzó a pensar en el partido frente a Panamá. Islas Vírgenes aprovechó para descontar algunos puntos pero nunca pudo preocupar a los venezolanos.

El partido se disputó en el estadio Ruca Che de Neuquén, 1.100 kilómetros al sur de Buenos Aires, y fue dirigido por el estadounidense Lonnie Dixon y el argentino Alejandro Chiti.

SÍNTESIS:

VENEZUELA: Guevara 10, Díaz 24, Torres 10, Lugo 16, Herrera 17 (fi), Machado 0, Mijares 0, Morris 0, Keeling 2, Nelcha 0, Becker 5 y Walcott 7. Entrenador: Jim Calvin.

ISLAS VÍRGENES: Oliver 10, Thomas 8, White 14, Heywood 17, Richards 9 (fi), Chelcher 2, Edwin 3, Averil 5 y Blyden 7. Entrenador: Tevester Anderson.