El partido del viernes por la noche dejó bien en claro que el equipo de Carlos Getzelevich deberá mejorar y mucho para superar a Bulgaria o Italia, y así acceder a los cuartos de fianl del Campeonato Mundial.

Argentina comenzó con todo. De hecho en los primeros puntos amagó con aplastar a su rival. Con la idea de marcar bien las diferencias.

Lo consiguió hasta el 9-4, pero de allí en más el equipo albiceleste comenzó a tener problemas en la recepción de Meana. Y Milinkovic erró mucho más de lo que acertó.

Entonces Japón comenzó a molestar y a complicar más de la cuenta, tanto es así que en varios pasajes del parcial inicial lo tuvo igualado con el equipo local (en 9, en 11, y en 13).

Después del segundo tiempo técnico Argentina comenzó a levantar su nivel ya que el "Caño" Spajic se mostró muy sólido a la hora del remate (metió cinco de cinco).

De pronto, Milinkovic se acordó de jugar y cuando Argentina pasó los 20 puntos dos derechazos del capitán argentino pusieron al equipo albiceleste con una clara ventaja de 22 a 17 con el que manejó a voluntad el cierre del set.

La irregularidad con la que Argentina terminó el parcial inicial se acentuó en el segundo set. De hecho después de ir al primer tiempo técnico arriba (8-7) la Argentina jamás volvió a estar arriba en el marcador hasta el final del set.

Spajic y Milinkovic empezaron a errar, Weber tuvo algunos desaciertos en el armado y el bloqueo fue ineficiente. Todo esto le facilitó el trabajo a Japón que con poco mantuvo importantes ventajas de entre 4 y 5 puntos para cerrar 25-21 el set a su favor, más allá de los cambios desesperados del técnico argentino que dejó en el banco en la parte final del parcial a sus principales figuras.

En el tercer set ya no estuvo en cancha Bidegain, tal vez el peor jugador argentino de la noche, pero Argentina siguió con esas intermitencias en las cuales juega en muy bajo nivel y entonces Japón, con Yamamoto y Kato, complicó otra vez al equipo nacional que desperdició ventajas importantes en la zona de definición.

Inclusive en un set point (24-23) la zona de bloqueo siguió siendo muy permeable (apenas 4 sobre 49 situaciones de bloqueo). Y cuando el equipo visitante tuvo una pequeña chance no la desaprovechó para cerrar 27-25.

En el cuarto capítulo Argentina comenzó mucho mejor que su rival. Conte y Darraidiu fueron muy efectivos en la zonas de definición y Milinkovic, a pesar de una lesión en su tobillo derecho que limitó sus movimientos, hicieron sólida a la Argentina en el ataque y le permitieron llegar a los tiempos técnicos con claras ventajas (8-4 y 16-11).

A pesar los habituales altibajos Argentina se mantuvo siempre adelante en el marcador y cerró el parcial 25-21 obligando al tie break del final.

En el set definitivo, todas las dudas invadieron el mítico Luna Park. Argentina seguía de error en error, fallaba a la hora de elegir los ataques y Japón enmudecía al estadio ya que tomaba ventajas de 10-7.

Pero en algún momento tenía que aparecer Marcos...