El partido inaugural tiene el atractivo extra de que el entrenador de Australia es el argentino Jon Uriarte, medalla de bronce con la selección de su país en el Mundial de 1982 y en los Juegos Olímpicos de Seúl 88.

Los argentinos llegan a esta instancia con una suma de resultados positivos en los partidos preparatorios que ha logrado recomponer los ánimos tras una decepcionante actuación del equipo en la Liga Mundial, competición en la que careció de carácter y actitud, según la impresión coincidente de la prensa deportiva bonaerense.

En la etapa preparatoria del Mundial Argentina venció en su territorio tres veces a Cuba, perdió con Bulgaria y ganó los dos últimos partidos amistosos, disputados en el rectángulo del Luna Park a puerta cerrada ante Francia y la República Checa, selección ésta dirigida por el local Julio Velasco.

EN EL DEBUT, UN RIVAL CONOCIDO
Carlos Getzelevich, entrenador del conjunto argentino, aseguró que Australia "es un rival complicado" debido a que posee "un gran ataque y un sólido bloqueo", pero aseguró que sus jugadores harán todo lo posible por "incomodar" a sus rivales.

En tanto, el central Alejandro Spajic indicó que la selección argentina "conoce muy bien" a la australiana debido a que se han enfrentado varias veces en los últimos tiempos.

"El australiano es un equipo con una importante estatura, que tiene jugadores muy fuertes los cuales destacan en el bloqueo, precisamente por su capacidad física", añadió el jugador del Poitiers francés.

Spajic, que participó con la selección albiceleste en el Mundial de 1998, dijo que Uriarte conoce "muy bien a todos y cada uno de los jugadores argentinos" y que "seguramente hará un gran planteamiento táctico".

"Será el partido del debut y, por la envergadura de este equipo australiano, será muy difícil. Habrá nervios porque comienza el camino para intentar alcanzar el objetivo, que es finalizar primeros de este grupo", comentó.

Jon Uriarte ha dicho que Australia "tiene previsto hacer un gran Mundial" pese a que la tarea como seleccionador en ese país, que emprendió hace menos de un año y medio, tiene "plazos por cumplir".

Los especialistas que han llegado a Argentina en los últimos días coinciden en que el equipo local está en condiciones de repetir la hazaña de 1982.

CON TODO EL APOYO POPULAR
Séptima en la clasificación FIVB, Argentina disputará su octavo Mundial -el séptimo consecutivo- frente a un público fervoroso, que en las competiciones locales empuja con entusiasmo y que no hace diferencias entre el fútbol y el voleibol cuando de una selección argentina se trata.

En ese aspecto, Getzelevich cree que sus jugadores han encontrado el punto de equilibrio que permitiría al equipo digerir positivamente el apoyo popular de forma tal que no se convierta en una presión contraproducente.

Uriarte conoce muy bien las condiciones en las que sus dirigidos tendrán que jugar el partido inaugural y las influencias que podrían ejercer en ellos los gritos de aliento con efecto multiplicado por la acústica del Luna Park, un recinto que ha albergado numerosas historias gloriosas del deporte argentino.