El dispositivo defensivo de la pràctica del martes se vio sensiblemente resentido por la ausencia del lateral izquierdo Federico Domìnguez, afectado de gripe y por el agravamiento de la lesiòn de mano derecha del capitàn y "alma" del equipo, el zaguero Gabriel Milito.

De todos modos, se estima que sòlo se trata de bajas provisorias, circunstanciales, que no correrìan ningùn peligro de ausencia para el choque del sàbado.

En el reinicio del trabajo luego del receso por las elecciones, Gallego parecìa tener todo bajo control, en el sentido de disponer y decidir la titulariad de los once jugadores que entre el Apertura 2002 y el presente Clausura, no perdieron ningún partido, con una cosecha de seis victorias y dos empates.

Pero el martes fue un dìa de presagios de algùn vuelco en relaciòn con esa alineaciòn "ideal" y campeona. En la pràctica a puertas cerradas el remplazante de Domìnguez fue Pablo Brandàn, mientras que el juvenil Juan Tissera ingresó por Gabriel Milito, luego de que el destacado defensor se resintiera de su dolencia debido a un choque accidental con su compañero Emanuel Rivas.

Milito, a quien el lunes le retiraron el yeso de su brazo derecho se resbaló luego de friccionar con el veloz delantero y sufriò un golpe en la zona afectada, debido a lo cual dejò el "picado" por precauciòn.

Pero la modificaciòn de mayor impacto fue la de Albil por Leo Díaz. Dìaz reportò una molestia en la rodilla derecha, pero el mèdico del plantel Juan Manuel Olivera dijo que no habìa sufrido lesiòn alguna. De todos modos, Dìaz aclarò luego que cuando saliò "el doctor estaba todavía en la cancha y no hizo tiempo" a revisarlo.

En cuanto a si habrà cambio de arquero, Gallego se limitò a responder: "Voy a realizar un sólo cambio por decisión táctica", duda que podrìa dilucidarse el miércoles cuando tenga lugar la pràctica màs relevante de fùtbol de la semana ante un combinado de juveniles de Sexta y Quinta divisiòn.