Morientes, quien aseguró que no ha "parado de sonreír nunca", señaló que está "ilusionado" en que va a disfrutar más opciones la campaña venidera, que tiene como colofón "una cosa muy importante para un jugador profesional, como la Eurocopa, y para ello hay que prepararse".

El delantero extremeño indicó que nadie le va a decir si va a "jugar seguro", por lo que su objetivo es "desde el principio luchar como todos los años para poder jugar".

Indicó que desde que llegó al Real Madrid todos los veranos se ha hablado de su probable marcha. "Al final ya son seis años aquí. Voy a cumplir uno más, me queda contrato y de todas esas especulaciones nunca ha salido nada en claro", dijo.

Indicó que por el club madridista siente algo "grande", pero que como profesional lo que quiere es jugar. "Es cierto que otros años no ha sucedido lo de este porque he jugado muchos más partidos. No tengo ganas de salir del equipo porque no haya jugado. Ya veremos lo que sucede de aquí a un par de meses", apuntó.

"El año pasado, cuando terminó el Mundial, daban por hecho que me quedaba seguro y a los dos días estaban mandándome a todos los sitios. Nunca se puede saber. En el fútbol hay que vivir día a día, vivir el momento, porque pueden suceder muchas cosas", indicó.

Morientes advirtió que "hoy por hoy la titularidad en el Real Madrid está muy complicada, pero uno es ambicioso y quiere jugar minutos" y reiteró: "De aquí a dos meses pueden suceder muchas cosas. Al día de hoy tengo contrato, pero la situación no es la que más me agrada. Habrá que ver lo que hay, lo que no, y el planteamiento que debamos tomar".

Lo que sí tiene claro el de Cilleros es que está "muy contento" en el Real Madrid desde que llegó. "El día que me vaya, si sucede algún día, estaré orgulloso de haber vestido esta camiseta y del trato que me han dado".

Para Morientes, el hecho de estar en la convocatoria de la selección nacional, algo que no ocurría desde el amistoso contra Paraguay en octubre pasado, "es un momento de alegría y de orgullo", porque, comentó, "el hecho de estar aquí es ilusionante y muy gratificante".

Por ese motivo, quiso "darle las gracias al entrenador (Iñaki Sáez) públicamente. Quizá si no hubiese lesiones", subrayó, "no estaría aquí, pero, sea como sea, el detalle del seleccionador es muy grande y en estos tres días lo único que espero es trabajar al máximo para demostrarle que puede volver a depositar su confianza en mí sin problemas".