La expedición madridista, en la que se desplazó el director general deportivo del club, Jorge Valdano, aterrizó en el aeropuerto Caselle de la capital piamontesa con 50 minutos de retraso, ya que el vuelo partió de Madrid más tarde de las 11.00 horas previstas inicialmente.

La incertidumbre sobre el estado de Ronaldo y la vuelta de Raúl González, que tuvo que ser operado de apendicitis el pasado 21 de abril, un día antes de que el equipo viajara a Manchester para disputar el partido de cuartos de final contra el equipo inglés, han marcado el desplazamiento del equipo.

El brasileño, uno de los más requeridos para firmar autógrafos en el aeropuerto, sufrió en el partido de ida contra el Juventus (2-1) una rotura fibrilar en el sóleo de la pierna izquierda, y aunque los servicios médicos del club estimaron su recuperación en siete o diez días el jugador se mostró dispuesto a jugar mañana.

"Estoy bien. Me he sometido a una prueba y la verdad es que me siento muy bien. Con el pasar de las horas soy cada vez más optimista, creo que podré jugar. Tengo muchas ganas de ayudar al equipo en un partido como éste", indicó Ronaldo en su página de internet.

El brasileño se pondrá a disposición de los fisioterapeutas del club a primera hora de esta tarde y se someterá a una prueba para determinar si puede participar en el entrenamiento del equipo programado también para esta tarde, a las 19.00 horas.