LOS ÁNGELES -- David Beckham anotó otro gol para el recuerdo.
Sucedió justo antes del descanso en el encuentro de Liga de Campeones de la CONCACAF frente a Isidro Metapán. Como siempre que está sobre el terreno de juego, el inglés fue ovacionado por las masas congregadas en la esquina. Colocó el esférico junto al banderín y soltó uno de esos cañonazos que suelen ir a parar a alguna cabeza o que finalizan en rechace.
Esta vez, el balón voló para colarse en el fondo de la portería en el que fue un gol olímpico con mayúsculas.
Los halagos de sus compañeros no tardaron en llegar. "Se trata de David Beckham, su especialidad es la de patear como nadie, es pura habilidad", señaló Juninho, otro de los protagonistas de la noche tras anotar dos de los cinco goles de su equipo.
Discurso al que se unió su compatriota Marcelo Sarvas. "Me sorprendió como siempre que vemos un gol de estos, pero sabemos que (Beckham) tiene la capacidad de hacer dos, tres, cinco como estos", comentó el mediocentro.
Y así es. El jugador franquicia del Galaxy anotó otro gol como hace un año a Chicago Fire en el mismo feudo donde lo hizo esta vez. Se trata de un auténtico experto en aprovechar esos disparos para cubrirse de gloria deportiva. ¿Se trata del mejor lanzador de faltas que ha dado el fútbol moderno? ¿Puede superarse a sí mismo con el paso de los años? Habrá gustos para todos los colores, pero lo cierto es que lo suyo es asistir, ya sea con el esférico parado o en movimiento.
Ante Isidro Metapán, participó activamente en tres de las cinco jugadas de gol, en las otras dos ya había abandonado el terreno de juego.
Primero centró desde la derecha para que una confusión entre Fidel Mondragón y Ricardo Alvarado acabara con el balón en el fondo de las mallas; luego puso un centro medido a Robbie Keane para que cabeceara y anotara el segundo, y por último, hizo las delicias de los pocos aficionados presentes para hacer el golazo de la noche y puede que de la temporada.
En el listado de pases certeros se registraron otros que no tuvieron final feliz, pero ahí quedan, grabados en un estadio que disfruta de uno de los jugadores más veteranos de la liga, con sus pros y sus contras. Su toque de balón es sin duda la virtud por la que destaca.
No se sabe si la presencia de Beckham en la selección de Gran Bretaña hubiera logrado que el equipo llegara más lejos, pero lo cierto es que el jugador ha demostrado ser olímpico, quizás no para el Stuart Pearce, pero sí para las defensas que tienen que aguantar sus finuras cuando la pelota sale de sus botas.