LOS ÁNGELES -- El Galaxy de Los Ángeles, que se metió a la fiesta grande de la Major League Soccer, a una postemporada con ricas viandas, que ofrece como platillo principal la Copa MLS 2012, a hurtadillas, por la puerta trasera, mediante la repesca de la Conferencia Oeste, ha abierto todo un mundo de posibilidades luego de su convincente triunfo sobre el San José Earthquakes.
Es que luego de dejar en el camino a Vancouver Whitecaps, con relativa comodidad, y de remar contra corriente, para terminar derribando al superlíder de la campaña regular, a sus vecinos del norte, el Galaxy ha potenciado sus opciones para repetir como campeón de la MLS.
Aún más, el equipo afincado desde hace una década en Carson, California, puede hasta llegar a convertirse en el anfitrión del encuentro que definirá al nuevo monarca, una final pautada para celebrarse el sábado 1 de diciembre.
Aunque, para que eso se haga realidad, deben cumplirse varias condiciones.
Primero, que David Beckham, Landon Donovan, Robbie Keane y sus secuaces logren coronarse como campeones del oeste, para quedar al mismo tiempo investidos como finalistas de la Copa MLS.
Para ello, el Galaxy debe pasar sobre el Seattle Sounders, en serie de doble juego, que se inicia el domingo en El Home Depot Center.
La segunda condición, sería que el Dynamo de Houston, otro invitado incómodo, que se metió de 'colado' al fandango emelesero, logre instalarse como el representante de le feligresía del este, en el banquete de honor de la MLS.
Los de Dominic Kinnear ya hicieron toda clase de estropicios en la fiesta, luego de poner el pie, para detener la puerta de acceso a la liguilla, que se les cerraba, metiéndose como el quinto y último lugar del sector, para arruinarle la celebración al Chicago Fire, en un juego reclasificatorio.
Después, los texanos dieron cuenta del invitado principal del sector, el líder Sporting de Kansas City.
Y ya encarrilados, ahora, todo lo que necesitan los de la Ciudad Espacial, es disponer del DC United, para repetir una película que ya vimos en el 2011: una final contra el Galaxy.
Una eventual reedición de la pasada Copa MLS que también tendría como escenario al Home Depot Center, debido a las nuevas disposiciones puestas en práctica por la liga en la presente temporada.
Una de ellas es la que impide que lleguen a la final dos equipos de una misma conferencia y, la otra, y en este caso, la modificación más trascedental, es la que dispone que la Copa MLS 2012 se disputará en la casa del equipo que haya logrado más puntos durante la campaña regular.
Por ello, en el caso de darse una final entre angelinos y texanos, la ventaja es para el Galaxy, que totalizó 54 unidades, por 53 del Dynamo.
Una final a la que el elenco de Bruce Arena podría acceder con el impulso que le ha dado a su ataque un inspirado Robbie Keane, autor de dos tantos en el 3-1 galáctico sobre San José, el miércoles, en Santa Clara.
No por nada, el atacante irlandés fue destacado como El Mejor Jugador del 2012 en la MLS, de acuerdo a una nueva tabulación realizada en todos los juegos de la temporada regular, a partir de aquel pasado 10 de Marzo de 2012.
Robbie Keane acumuló 854 puntos en los 2,520 minutos en la cancha, vestido con la camiseta del Galaxy, a lo largo de la campaña.
Keane, en su categoría de delantero, superó a 454 jugadores de la MLS y dejó atrás al monarca de goleo de la liga, el atacante de San José, Chris Wondolowski, por un margen de 18 puntos.
La calificación se basó en tres aspectos vitales del futbol: mayor número de disparos con dirección a la portería, porcentaje de éxito en las confrontaciones individuales y capacidad para pasar el balón.
Armas que Bruce Arena y el Galaxy pueden utilizar, no solo para meterse a la disputa de la Copa MLS 2012, sino hasta para engullirse todo el pastel de la gran comelitona emelesera.